Ir a la N van Carmen: «Me gusta dejarme llevar con el arte y echar broma».

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foto cortesía de Bram Berkien‎
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por @johnmanuelsilva

Ir a la N Van Carmen fue la ganadora del 4to Concurso Anual de panfletonegro, convocado desde hace cuatro años para celebrar el aniversario de la página. Con su texto «imagínatelo sin imágenes«, Van Carmen es la tercera mujer que gana el premio de forma consecutiva. conversamos con ella.

¿Desde cuando escribes?

Oí el llamado de Acude, quienes me hicieron creer que me estaban esperando, pero nadie en mi casa tenía la paciencia para hacérmelo llegar. Tuve que esperar a la profesora de preparatorio, quien nos prepara-toreó en la escritura.

¿Cómo se te ocurrió el texto con el que ganaste el concurso?

Empecé buscando en el diccionario (léase hoy día wikipedia) la definición de lo que iba a hacer. “Ciencia ficción. Ah, esto es”. Luego unas preguntillas básicas al estilo ¿Qué quiero yo del futuro? Aunque no sé bien la respuesta, “anti-apocalíptico” fue el adjetivo que me gustó para guiarme. Me inspiré un poquito en la película “Her”, porque muestra un futuro que se parece y no se parece al actual, además de ser antiapocalíptica.

La idea central la medité hace como 10 años, en una de esas de “cómo convencer a la gente de …”, o por qué el mundo habría de cambiar. El cuento lo fui hilando en un fin de semana en una isla, donde toda la isla estaba relacionada con un festival de teatro (cheverísimo, Oerol Festival). Entre el frío del camping antes de dormir, el mareíto del ferry y las propuestas artísticas, fui yendo y viendo mentalmente con el cuento. La noción del sordo mudo que reconocía acentos mientras leía labios fue en un restaurante lleno de gente, donde no se le entendía nada al mesonero.

¿Qué te parece haberlo ganado?

¡Buenísimo!. Siento que es una puerta que se abrió.

¿Qué te llama la atención de panfletonegro y qué lo distingue de otras publicaciones?

Panfletuflasnegros me produjo cierto shock hace 1 o 2 años cuando me dí cuenta que podía saber más de lo que pasaba en mi país leyéndolo que buscando info en los periódicos tradicionales. A veces me da pereza y no estoy de acuerdo con muchos de los escritos. Algunos autores son unos amargados y se quedan solo con una tajada de la naranja podrida. Pero lo que no podemos dudar es que panfleto hoy día es referencia. Y algunos escritos están mi amor.

En tu texto haces una ironía, cito: “Ellas son como un cuento chimbo que obtuvo mayor cantidad de votos en un concurso, y los chimpancés son como un cuento bueno buenísimo pero que fue leído por tres pelagatos.” ¿Crees que pasa eso con los concursos, que la calidad queda supeditada a la popularidad y que lo popular no siempre es bueno? Y en ese sentido: ¿Crees que tu post se impuso por su calidad o porque hiciste una buena campaña promocionándola en redes sociales?

El balance calidad-cantidad está latente desde que el mundo es mundo. Depende de ti hacer un juego que: siga las reglas, te divierta y además evidencie los valores de un mundo donde te gustaríavivir. El post lo usé como excusa para acordarme y comunicarme con panas, conocidos o la gente que anda por ahí puesjm. Respecto a la “campaña”, ésta era prácticamente “pana me encantaría que tú también escribieras algo, anímate, es liberador”.

Muchísimos de los mensajes fueron personalizados. Muchas veces me imaginé que ese pana de verdad entraba en un nexo conmigo; soñaba que se atrevería a idear un futuro y quizá escribiría de ello. Eso hubiese hecho MUCHO más divertido el concurso. Esos instantes me llenaron de satisfacción. Creo firmemente en el poder de comunicación del uno-a-uno. En Caracas me encantaba conocer gente y eso no lo hice pensando que las personas actúan en masa, sino a través de esa pequeña ley, la del individuo, la que dice buenos días y mira a los ojos y los esquiva porque mirar a los ojos es too much; la que quiere oír ese latido ajeno y trata de resonar con él.

Como diría el autor del cuento, de balls que ganó porque me dediqué a repartirlo por ahí, pero eso no implica que el proceso haya sido tan divertido como el cuento.

¿Podemos comprometerte a que sigas publicando en panfletonegro de forma regular?

Sí.

(Espacio en blanco).

¿Estás trabajando en algún proyecto relacionado con tu escritura en estos momentos?

Sí, ando haciendo cosillas para tratar de encontrar trabajo en divulgación científica o en escribir cosas divertidas. No sé si lo logre, por aquello de las vueltas del vivir. Creo que la ciencia se ahorraría mucho sudor y maltripeo si fuese más visual. El plan es que la información no te sofoque pero que tampoco sea superficial. Me importa que la gente quiera más, no quiero decir quererlo todo hoy, sino hoy, mañana, pasado, i.e., crear el hábito de informarse.

Eres emigrante, ¿cómo te relacionas con eso ahorita que el tema está en boga y que todos parecen tener algo que decir sobre la emigración?

Me parece cómico que digas “todos parecen tener algo que decir sobre …”. Ya la he leído la frase como 3 veces y me sigo riendo. Ahora es que falta, magináte.

¿Aparte de escribir qué te gusta hacer?

Me gusta dejarme llevar con el arte y echar broma. Mi cosa favorita de la vida es concentrarme. Es difícil pero ahí vamos.

¿Algún mensaje final para quienes te leen en panfletonegro?

Esto me suena así tipo “si te vas a morir ¿qué le dirías a la humanidad?”. Le diría: “Epa, mira tú, sí tú, trata de aprender a escribir con la mano inútil que tienes, para que veas cómo te cambia la vida sin querer queriendo”.

Tripeen burda esa fiesta y pa´lante es pa´ya.

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