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Peor Que Tú

Descalificar Peor Que Tú, con la mediocridad de decir que se trata del librito de un sifrinito que plagia a Hunter Thopmson y Tom Wolfe, es fácil; después de leerlo dos veces, he de decir que este libro le va a desagradar a mucha gente.

El argumento es sencillo: Barbie, una chica de 14 años; luego de intentar ir a terapia y no lograr nada, luego de confirmar que no puede adaptarse al mundo; encuentra en un diario y en un grupo de adolescentes que celebran una especie de ritual donde se masturban y se meten pastillas; el refugio perfecto para hacer sus sueños y pesadillas realidad.

Partiendo de esa premisa, el libro se mueve en lo abstracto y eso es lo que más me gustó de él. Las frases sueltas se entrelazan con la misma incoherencia con que lo hacen nuestros pensamientos, es como meterse en el subconsciente de una chica e ir comprendiendo su desesperación y, esto es lo mejor, asistiendo a una lucha entre ella y sus deseos más bajos, representados aquí en un diario que cobra vida e increpa a su autora.

Como dije, el tono del libro, la historia de la adolescente que se refugia en su propio mundo, la experimentación con pastillas, las reminiscencias de los relatos que el propio Gabriel Torrelles publicaba en Urbe Bikini y la novela en general se prestan para la fácil descalificación. Afortunadamente el autor lo entiende así y por eso, en el mismo inicio del libro, Torrelles le da su merecido crédito a García Márquez, a Ray Loriga y a Chuck Palanhiuk, sin complejos el autor admite haberse robado noticias, discursos políticos y hasta conceptos de Wikipedia.

Además Torrelles nunca pretende decir que Peor Que Tú es una novela literaria que pretenda revolucionar o cambiar la literatura venezolana ni mucho menos, al contrario, al leerla sabemos que es el desahogo de un autor que deseaba suicidarse porque sabía que el mundo era una mierda, pero como no tuvo las bolas de hacerlo, pues escribió un libro para seguir adelante. Es como el exorcismo de los demonios del escritor y al mismo tiempo de quien los lee.

También es el dibujo, hecho con un marcador de tinta negra y en el estilo de las ilustraciones que acompañan cada capítulo, de la juventud contemporánea, de nuestra generación que ni tienen el desencanto suicida de la generación x ni posee ilusión o esperanza alguna.

Pero como dije, este libro no le va a gustar a un gentío. Los críticos literarios la despreciarán y calificarán a Torrelles de ser un vulgar plagiador de autores gringos, incluso leí en Internet que hay gente que la encuentra similar a Pim Pam Pum, aquella novela que Alejandro Rebolledo publicó a finales de los noventa.

Pero en lo que a mí respecta, me fascinó y lo digo sin reservas: Pero Que Tú es el libro que me va a acompañar durante un buen rato y es que se me ha hecho casi imposible no identificarme con los pensamientos de Barbie, con su desencanto, con su arrechera, con su desprecio por el mundo…

En particular, cuando leía la grandiosa secuencia de la toma del liceo, cuando las cucarachas gigantes se comen a los adultos porque el más inteligente chico del salón así lo dibujó en el diario de Barbie, sentía que estaba leyendo algo escrito por mí.

La imagen no se me sale de la cabeza: yo también he deseado que salgan cucarachas gigantes a comerse a mis padres o que los presidentes se suiciden durante un discurso, yo también he sentido lo que Barbie siente cuando se encierra en su cuarto a dibujar su mundo propio queriendo que todo sea distinto.

Al final, el libro cierra con esperanza, encontraremos el valor dice, y uno adivina que el mensaje obvio es seguir adelante a pesar de que el mundo sea una mierda. En fin, un gran libro y me sabe a mierda lo que digan los que sí saben de literatura.

10/10

John Manuel Silva

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