Los Venezolanos TODOS jugamos a ser JUECES. Prejuzgamos y juzgamos y a menudo nos equivocamos y sembramos desdicha. No somos ecuánimes sino injustos. No somos equilibrados sino suspicaces, susceptibles, egocéntricos y de visión estrecha. ¡Y juzgamos! Podemos llegar a ser sumamente implacables con los demás y no menos indulgentes con nosotros mismos. Nos fiamos de indicios
equivocados y de nuestras percepciones erróneas; nos permitimos criticar, descalificar, difamar, chismorrear, juzgar. Tenemos una mente errante, dispersa, confusa, ávida, tocada por la aversión…., y ¡juzgamos! El sabio comprende la debilidad de los demás, pero el ignorante siempre está presto a descalificar, insultar, zaherir y juzgar, esta conducta es muy propia de una visión desequilibrada , una actitud incorrecta y un corazón emponzoñado. Y esta tendencia persiste en TODOS nosotros, y se desencadena automáticamente cuando menos lo esperamos; en algunas personas es más grave y llega a ser cronica.
No está de más aplicar un poco de equilibrio a nuestros juicios, pareceres, opiniones y, por supuesto, procederes.
Un Peatón sin Barreras
Arq.Iván Enrique León Hernández
www.peatonessiinbarreras.tk
[email protected]
[email protected]
0412-585-6762
Venezuela-Caracas, 6 de Agosto de 2010.
si, por esos somos Venezolanos, solo que te comiste la careta de felicidad que nos ponemos para hacernos los locos…
Quizá sea un comentario a destiempo por la fecha en que fue publicado el articulo, pero creo que a propósito de la relación que le dan en la página a este articulo con el mio y que en efecto creo que tiene con este articulo que yo escribí más reciente (23/06/2011) llamado Ser o no ser ¿De verdad estará ahí el dilema?, me permito comentar.
Brevemente creo que debo decir o más bien repetir lo que planteo en mi articulo; la propiedad y la saña que muchas veces tenemos para criticar, prejuzgar, ofender, desvalorizar y lo que podría enumerar como un largo etcétera en muchos casos, y sobre todo en nuestra actual realidad de país, bañados o más bien empapados de un discurso y una repetición del discurso político enfermizo y enfermante que oímos a diario, y que es una cotidianidad que debemos enfrentar casi en contra de nuestra voluntad y porque si, porque cuando llueve que empapa ni aún quedándonos resguardados hasta que escampe podemos escapar del sonido de la lluvia, y la lluvia nos afecta y nos compete por re o por fa.
Y bueno, creo que eso de la actitud que describen se debe a una perdida de empatía en quienes alguna vez la tuvimos, y en una carencia de la misma, en quienes no se la hemos podido enseñar, ya que la perdimos. Pero además de ver el problema y la causa debemos saber encontrar la solución, y aún más, debemos ser capaces de aplicarla efectivamente.
Una manera, sería una campaña donde el lema y el propósito sea Tratar a todo el mundo como queremos que todo el mundo nos trate a nosotros, es lo que yo propongo en mi escrito, una campaña que luego de la reflexión este acompañada de la acción.
Ah y lo que comentaba Goddamn Devil, creo que es cierto y se trata de hipocresía y apariencia, y lo trato también en mi escrito.