(Fragmento)
La cucaracha, la rata, y el gusano, estaban reunidos, y el gusano aprovecho para tratar un punto que le preocupaba. Erguido sobre una piedra, el gusano pregunto:
-¿Tu crees que la clonación puede resucitar a las personas?-
La rata no sabia si aplaudir o recriminar, la cucaracha y la gallina aplaudieron, mientras el gallo de pelea, se negaba a aplaudir semejante tontería.
-Basta, ya escuche suficiente.- dijo el mono.
-Si, esos humanos se quejan demasiado.- acoto chispa, cerrando los ojos y levantando el pico.
<< ¿Los animales tienen espíritu?>> pensaba el loro, <<llevo treinta años sin tener sexo, estoy calvo y parezco un buitre.
-Los humanos nos arrojan veneno.- grito el gallo de pelea. Los rostros se llenaron de sorpresa, todos murmuraban, la indignaron era grande, y la rata se desmayo.
-¿Existirá algún organismo internacional que nos pueda proteger?- pregunto tontin visiblemente preocupado.
-Si, el organismo se llama: No seas imbecil.-
El loro interrumpió, para calmar los ánimos. –Compañeros, vamos a calmarnos, las ofensas están demás.-
El loro era un personaje muy extraño, desde niño, sufría pesadillas donde el se ahogaba con su propia saliva, la pesadilla era de larga duración, se veía a si mismo como un gran orador, un superhéroe capaz de todo, un ser bien diseñado que disfrutaba de pies y manos, y de unos perfectos labios para besar al amor de su vida, y a una que otra fanática desenfrenada, aunque el loro ya era famoso sentía que le faltaba algo. En ese momento hizo su entrada triunfal, el inigualable, conspicuo, practico, y circunspecto señor burro, que de inmediato se dirigió a los presentes.
-Habitantes de este patio inmundo.-
-¿Nos esta llamando sucios?- se pregunto el cerdo.
-No, solo nos hace ver que no tenemos un mundo.- aclaro tontin.
-Ah, ya comprendo.-
El burro prosiguió.
-La humanidad se habrá extinguido antes de que concluya este milenio.-
-Si, malditos humanos, que se mueran.- dijo chispa saltando.
-Si, que se mueran los humanos, menos la tía Mónica, ella es la que nos da la comida, nos alimenta todos los días, y nos presta abrigo.- expreso la gallina.
El loro, comenzó a cantar una especie de himno: -Yo quisiera que los pollitos, fueran, fueran paralíticos…-
-¿Qué dicen los pollitos?- pregunto la iguana.
Y ellos respondieron en coro: -pío, pío.- Y volvió a preguntar. -¿Cuándo tienen que?- y ellos aun más fuerte: -¡Cuando tenemos hambre y frío!- La iguana insistía. -¿Cómo esta la moral?- y ellos con su coro optimista: -La moral esta bien, muy bien.-
-Una inmoral preguntando por la moral.- canturreaba la cotorra vecina.
-Que opinión tan inmoral.- cacareo la gallina.
-La moral es imprescindible, si carecemos de moral, no podemos competir contra los humanos.- chillo el mono.
-Yo pensé que competíamos en una exposición canina.- dijo el gato.
-Y yo pensé que vería una pelea de gallos, o al menos una pelea de bachacos.- Balbuceo la lombriz.
-Yo no pensé nada.- aseguro tontin.
El burro mas inteligente del mundo retomo la palabra, había que ganar tiempo a como diera lugar.
-Animales del mundo, no estamos aquí por azar, no teniendo nada que ver nuestro destino con alguna agencia de loterías.-
-Ecologistas apocalípticos que piensan siempre lo peor, fatalistas, y profetas del desastre.- gruño el gallo de pelea.
Aunque el burro más inteligente del mundo no quería causarles pánico, no dudo en advertirles.
-En cualquier momento, un meteorito puede liquidarnos a todos, explotando a este planeta, con la fuerza de veinte mil bombas nucleares…-
-Quisiera irme de este planeta.- señalo el pato, presa del miedo.
-¡Desertor!- increpo el gallo de pelea.
El burro parecía no molestarse con las interrupciones.
-Por ultimo, quiero anunciarles que el astro rey, el sol, ya tiene Twitter, el sol ya esta preparado para contar su día a día, en una aventura solar a solas. El sol de manera muy fresca, documentara los preparativos para achicharrar a la tierra, por supuesto, en cuanto el, tenga a bien hacerlo, el sol, ha comenzado a enviar actualizaciones sobre su próxima actividad en su cuenta de Twitter, elsolnotequemara:
Yo si los quemo, ¿y qué?
-Que estupido burro, el sol no puede tener Twitter.- refunfuño el gallo de pelea.
-¡Incrédulo!- le recrimino la gallina.
-Tun tun.- dijo el murciélago de la guerra, simulando tocar una puerta.
-¿Quién es?- pregunto tontin.
-Gente de guerra, ábranme la puerta que quiero pasar.- respondió el vampiro.
El gallo de pelea, gritaba al burro.
-Burro aberrado, inmoral, por allá dicen y que te vieron haciendo el baile de la burriquita, yo no tengo nada en contra de los travestis, pero esto es el colmo, todo tiene un limite, esto es la perdición.-
El burro solo contesto. –Amigo, déjeme decirle que yo no soy un burro, yo soy un asno. Y mi vida privada no es de su incumbencia.-
El sapo aprovecho para cantar.
-Nadie compra la leche, si le regalan la vaca.-
-¡Que asombrosa reflexión!- expreso tontin, con un brillo inusual en los ojos.
-Si, este debe ser un sapo del futuro, es un stand up tragedy.- dijo la mosca.
El sapo continúo.
-El hambre no existirá más.-
-Pero que imbécil, así nadie va a llorar.- murmuro la iguana.
-¿Abuelito, que dice la señora flaca y vestida de azul.- pregunto el turpial al lobo feroz.
-Dice que ella no es una rana, y que el hombre si existe.-
El sapo sacando la lengua:
-En el pasado tus ancestros sufrieron un grave crimen, y los culpables están aquí, y son los humanos.-
El cardenal, desde la rama de un árbol, pregunto al lobo feroz.
¿Abuelito, que dice el niño amarillo que viste de negro?-
-Dice que los culpables no están aquí, y que todos somos hermanos.-