Antes de entrar a la sala, discutía con mi hermano sobre los riesgos que implican entregarle una licencia muy establecida en la conciencia colectiva de la gente a un director con un estilo marcado y una tendencia a imponerse sobre el material con que va a trabajar.
En nuestro pais, El Avispón Verde, una serie de radio americana sobre un justiciero enmascarado (adaptada luego a televisión con la participación célebre de Bruce Lee), no es muy conocida. No así en el norte, donde gozó de una gran popularidad. EL asunto ha sido tan delicado que de hecho la adaptación cinematográfica estuvo en development hell por más de 10 años, e incluso se considero a George Clooney para el papel principal.
De ahí en parte la preocupación (personal) de que el proyecto finalmente terminara en manos de Michel Gondry. Parecían incompatibles sin que cambiara radicalmente el planteamiento.
El resultado es de alguna forma, inesperado. Gondry cargó el argumento con su humor situacional y sus dialogos peculiares, encauzando a otro sitio la esencia del avispón. The Green Hornet es completamente autoconsciente, lo disfruta y lo señala constantemente. Los protagonistas Britt y Kato (Seth Rogen, Jay Chou), desmontan los arquetipos del héroe y su sidekick, invirtiendo sus virtudes convencionales y exagerándolas.
En ocasiones el efecto Gondry desborda el flujo de la pieza, y parece perderse a momentos sosos y sin ningún sentido. Pero en los buenos, es hilarante y tan absurdamente explosiva que vale la pena.
Lo que sucede (me dirán los que sean más conocedores del Hornet) es que es realmente novedosa, pero mejor obviar que es una adaptación si eso genera algún tipo de expectativa.
Ah!
Y dos palabras
James
Franco