“It’s not fair
And I think you’re really mean
I think you’re really mean
I think you’re really mean
Oh you’re supposed to care
But you never make me scream
You never make me scream”
Lily Allen – Not fair
Cada aplauso, cada grito, cada slogan, es la mano que masturba a la revolución bolivariana. Multiorgásmicos, fantasean con un presente eterno que nunca empieza ni termina. Ésa es la única forma que tienen para llegar; pero son tan mala cama, que confunden los gritos del amante que se fracturo la pierna, con alaridos de éxtasis.
El miedo es libre y el chavismo tiene mucho miedo, por muchas razones. Los grandes ligas, la cúpula, están muy claros en una cosa: Chávez en el poder, es la única garantía que tienen para no ser capturados por la justicia, dentro y fuera del país. Muchos están involucrados hasta el cuello en narcotráfico, tráfico de armas, lavado de dinero, corrupción, entre otros deportes ilícitos. Otros, defendiendo su cuota de poder, su condición económica, mal habida o no, pero no quieren un cambio de gobierno que les cierre el chorro; el resto son enfermos, como Farruco.
Por eso se visten de rojo, por eso gritan, por eso repiten el mismo discurso, por eso descalifican, por eso mienten, sin que un solo musculo les tiemble.
La campaña electoral rompe colchón
Los chavistas andan de compras en el sex shop. Palabra clave: seducir.
La verdad es, camaradas, que no se nos para ni el reloj cuando se le acaba la pila. Vamos a echarle los perros con todos los hierros al pueblo. Todo el mundo a comprar cajas y cajas de Leche de la mujer amada, a estacionarse al atardecer en todos los miradores y en este país está decretado el día de la secretaria por los próximos dos años.
Lástima que el concepto que tienen los chavistas del sexo es tan banal e inocente como de quien pega en su carro una calcomanía que muestra: Marca de carro + Caña + mujer = sexo
Las interpelaciones se convirtieron en parte de la campaña electoral. Los ministros vienen con el objetivo de darle un poco de oxigeno al gordito, vienen a refrescar el show. Falta la cámara/helicóptero que una vez utilizó Radio Caracas Televisión en una de sus preventas como una gran novedad en la época, en un lugar de la historia de cuyo nombre no quiero acordarme. Así las cosas, videos, láminas, conciertos y discursos (que parecen la visión, la misión y los objetivos de una arepera socialista) están a la orden del día.
El marketing electoral del 2011 sigue las siguientes directrices:
1. Recordar que le están hablando al pueblo, por lo tanto, siempre dirigirse a la cámara, tipo mitin.
2. Todos los problemas del país son heredados de la “cuarta república”, y el deterioro es tan profundo y severo, que en 12 años se ha hecho imposible solucionar todos ellos. Reconocemos que aún falta, pero seguimos trabajando.
3. Es muy importante que cada vez que se esté hablando de las penurias vividas durante la “cuarta”, señalar a la bancada opositora, porque el objetivo principal es que la gente identifique a la Unidad Democrática, que enfrentará a Chávez en el 2012, con el pasado.
4. Las reivindicaciones de los pobres solamente será posible en socialismo, y por supuesto, en la revolución bolivariana.
5. Cuando se esté hablando de logros de la revolución siempre agradecer a Chávez.
6. Relativizar y simplificar la discusión: derecha/izquierda, bueno/malo, vida/muerte, pasado/presente, verdad/mentira. Utilizar palabras absolutas: “Nunca antes en Venezuela se había hecho ______”, “Jamás se vio en la cuarta república _________”, “___________ era impensable cuando los adecos y copeyanos…”, “Por primera vez en la historia…”
7. Tergiversar y dramatizar la historia y contrastarla con la revolución.
8. Mostrar superioridad moral, relacionando intrínsecamente a la revolución con los más excelsos valores de la humanidad y darle rango universal.
9. Explotar un discurso proteccionista, reaccionario y ultraconservador.
10. Uso exacerbado de epítetos y adjetivos; los buenos para la revolución (digno, verdadero, hermoso, noble); los malos describen a la oposición/derecha/burguesía (apátrida, explotadores, irresponsables, mentirosos, hipócrita, fariseo).
11. Explotar constantemente el resentimiento.
12. Repetir frases y slogans para afianzar la identificación con la revolución.
13. Dar por sentado realidades: “Nuestro pueblo sabe/ no se va a dejar engañar”, “Ellos nunca van aceptar/hacer…”.
14. Proyectar en el contrario los defectos y debilidades propias más evidentes.
A grandes rasgos, ésas son las características del discurso que hemos escuchado de todos los ministros y diputados del chavismo que han intervenido en las tres sesiones que se han llevado a cabo durante estas dos semanas. Todo fue fríamente calculado: la cadena, el material de apoyo, la intervención de los diputados chavistas, los discursos. De hecho, fueron preparados con las respuestas a las preguntas obvias que haría la oposición.
A lo anterior hay que agregar toneladas de cursilería, mal gusto y auto indulgencia. La ligereza con la que mentían utilizando las cifras era pasmosa. Los números eran risibles, se les pasó la mano, se volvieron como locos. A punta de power point somos, nada más y nada menos, que la circunferencia del círculo.
Telecorazón I: El cinismo reloaded
Elías Jaua
El recoge desastre del nene. Con lavansan en mano y el coleto en la otra, hablaba siempre antes de cada ministro, así la pregunta no fuera para él. Se mandaba un discursito almibarado en algunos casos, déspota en otros, cínico siempre. Pero, mientras hablaba durante el transcurso del día, me di cuenta que Elías Jaua es un fascista de los peligrosos, más que el gordito, un rato largo. Su lenguaje corporal, la forma de hablar, sus análisis y argumentos son propios de un miembro de secta. Cita textual: “Bolívar es el alfa y el omega de la nación suramericana”.
Su “memoria y cuenta” versó sobre la emergencia de las lluvias, la estafa inmobiliaria, la crisis bancaria (sólo hizo referencia al Banco Federal, of course), el caso PDVAL (todos los responsables están presos, ¿Cuándo en la 4ta?) y la crisis eléctrica (Solventada ¡por este puñado de cruces!), todos, tocados muy vagamente, y claro, fueron “Cinco crisis y cinco victorias, en el 2010 se dejó claro que el pueblo venezolano no es un grupo de lloricones y lloriconas”, también dijo esto otro: “Para el Gobierno del Presidente Chávez un solo muerto es demasiado… respondemos con dolor y con responsabilidad con los asesinatos producto de la violencia criminal”.
Cerró con, según él, es el más grande logro de la revolución: el vídeo de la exhumación de los huesos de Bolívar. Palería pareja para inaugurar la velada del martes 8 de febrero.
Tareck El Aissami
Él y todos los enterados sabíamos que éste muchacho iba a llevar la peor parte. Ostentar el primer lugar en la lista de problemas venezolanos es bastante, y la inseguridad es el claro ganador en unas olimpiadas infames. Vino preparado el ministro, y mucho, pero nada, la realidad lo desborda. Verlo durante ese largo día fue un despliegue de emociones, un banquete sicológico. Comenzó didáctico, correcto, profesional: cifras, logros y amor al prójimo. Una vez los diputados de la oposición lo acorralaron con otros números, se mostró hostil, envenenado y a la defensiva.
En algunas intervenciones posteriores se mostraba conciliador y proactivo, dispuesto a un nuevo comenzar. Cuando tocó el grupo de músicos conformado por “privados y privadas de libertad” (Se ofendió cuando los llamarón reos), fue el éxtasis humanista.
Pero nada, ya venía con plomo en el ala. Cifras que no pudo refutar lo trastocaron: “En Venezuela hay 33 penitenciarias, con capacidad para 14.000 reos, actualmente hay en las cárceles venezolanas 44.000 personas. Durante su gestión han muerto 2000 presos”, y eso fue lo más bonito que le dijeron. Incapaz de aceptar los 19.000 homicidios del 2010 (Sólo mostró las cifras por estado, nunca totales, y por supuesto, lideraba Miranda y Carabobo, Distrito Federal de curato), el ministro, después de una larga y agotadora jornada, se quebró sicológicamente, su última intervención fue la de hombre cansado de tanto tapar las goteras, de tanto mentir.
El resto…
El ministro de defensa, Gral. en Jefe Carlos José Mata Figueroa, un tipo bastante limitado y nada carismático para la estrategia 2011. Elías Jaua lo respaldaba constantemente, especialmente cuando se tocó el caso CAVIN e infiltrados cubanos. Si un ministro de defensa totalmente parcial con Chávez es un escándalo para una galla como yo, imaginen al tipo diciendo que necesitamos invertir en armamento militar porque estamos “asechados”. ¡Como si le estuviéramos vendiendo el petróleo a Florentino y El Diablo! Patético.
Telecorazón II: La comparsita
Nicolás Maduro: Bajo perfil el primer día, en el segundo de campaña electoral, fue el padrote malandro designado para recogerle el guante a la oposición según la eventualidad que se presentara. Él estaba acompañado de ministras recién nombradas, títeres y planetarios como es el caso de Farruco.
Estos funcionarios, luego de que Nic le pusiera el toque mafioso adecuado, se dedicaron a leer discursos prefabricados e infinitamente aburridos, jalar bola como si de eso dependiera su vida y a repetir las mismas frases almibaradas y cursis según marca el canon chavista.
Farruco trajo los tambores, la ministra indígena dijo que la oposición amenazó a los indígenas con mutilarle sus partes intimas si votaban por Chávez y esta cronista vio, por primera vez en su corta vida, la vena brotada más larga en frente alguna, la vio en la cabeza, por cierto, del mismo pana que subió a darle unas manos a Marquina, el momento más emocionante y patético de ese largo día. El momento en que Soto le mandó a cortar el audio a una histérica Cilia Flores fue de una belleza inaudita.
Sin penas ni glorias terminó el peor día de toda la historia de la nueva Asamblea Nacional. La decadencia y el vacio: forma y contenido.
Telecorazón III: My precious
Y entonces me dispongo a ver el último capítulo, esperando algo distinto, por eso de no tener tan poquita fe, y se monta el Gollum (léase Rafael Ramírez) y dice: I can toc washigton to.
El autor del célebre “rojo, rojito” (¿para qué ser rojo si se puede ser rojito?) El ministro que más ha durado en el puesto, el que guarda los secretos más sucios de la revolución bolivariana (Si me sacas te hundo gordito ¡Mosca!), el venezolano que ha disfrutado de una PDVSA inauditable y sin ningún tipo de control, probablemente sea el ministro que más ha robado, aunque ¿Quién sabe?, En fin, Rafael Ramírez, el responsable del quiebre de la estatal petrolera, no se iba a quedar atrás en el tonito, ni las mentiras y mucho menos en el grado de cinismo.
Ahora resulta que la gigantesca deuda de PDVSA es porque, nadie en su sano juicio, invierte el flujo de caja, entonces se pide prestado para invertir en el plan “siembra del petróleo”, es decir, se invierte en estructuras, calles, carreteras, casas, puentes, que si usted querido lector, deja la fucking flojera y se asoma a su ventana, verá en todo su esplendor.
Venezuela no pagó ni un medio por la plataforma pearl, que se hundió una vez Chester la bendijo (Pobre Magallanes, esa pava hunde hasta una pluma en Las marianas), PDVSA está “extraordinariamente” bien, aquí no habrá racionamiento de gasolina sino “recorte en el consumo”, nosotros no le hacemos descuento a nadie pero si hacemos intercambios “estratégicos”, es decir, cambiamos petróleo por médicos, caraotas y carne, porque como nosotros vivimos en la cuarta dimensión, pues aquí es imposible obtener esos profesionales y productos.
Un inmutable Rodríguez Araque, habló… El señor está encargado del problema eléctrico. Éste es, de lejos, la crisis más difícil de ocultar, porque se va la luz y ya. Él dijo muchas maravillas, números, cifras y vatios, pero la verdad la sabremos una vez el verano arrecie. Por su parte, el de Transporte y Comunicaciones, Francisco Garcés y el de Ambiente, Alejandro Hitcher, leyeron, respectivamente, sus discursos envasados al vacío, y los dos coincidieron en que, tanto el Bus Caracas como El Guiare, gozan de “buena salud”.
Factores invariables: los diputados chavistas no preguntaban casi nunca, y cuando lo hacían, eran preguntas que servían para desviar el discurso opositor o para pasarle la pelota a un ministro en espera del turno al bate. La jalada de bola a Las Fuerzas Armadas fue tal vez igual, o mayor, a la propinada al gordito.
La oposición estuvo bien, en algunos casos las intervenciones estuvieron excelentes, en cuanto más concretas y documentadas, otras estuvieron regulares, y por ahí, unas pocas, dieron vergüenza. Lograron, en algunos casos, hacer a los ministros aceptar realidades, pero las mayorías de las preguntas o no fueron respondidas, o se perdían en la fantasía revolucionaria.
Así terminó esta larga sesión masturbatoria. El chavismo llegó a un punto de no retorno. Para ellos caer en las más evidentes contradicciones, manipular cifras, mentir descaradamente, jugar sucio, sacar trapos y cacarear ad infinitum un discurso anacrónico, vacío y reaccionario, ya no representa dificultad alguna, sacrifican la lógica más elemental y la realidad en pos de un objetivo: mantenerse en el poder a toda costa. Para ello, utilizarán a la gente como animales de circo, emplearán los recursos del estado y abusarán de todos los privilegios que les confiere la concentración del poder.
tanto, el país se cae a pedazos, la burocracia y la corrupción se comen lo poco que queda, la delincuencia permanece invicta, la gente huye, la economía se suicidad, los bates se quiebran y se va la luz. Chávez, el único hombre en la historia que pasado un camello por el ojo de una aguja, guía a la democracia más democrática del universo hacía el basurero de la historia.
El amante fallido se empeña en fecundar a su muñeca inflable.
Ante, el siempre cercano apocalipsis venezolano, queda seguir en la faena. Alerta y pendiente. Ahí, si nos ponemos apáticos, indiferentes y nos vale mierda el país, si dejamos de ser contestones, ahí, nos tendrán donde quieren. Criticar a la oposición cuando toque debe convertirse en un deporte nacional, pero con nuestras diferencias, éste es un juego que se ganará jugando en equipo.
Entre tanta inmundicia, si hubo tiempo para la jodedera, no faltaba más. Estamos hablando de un promedio de 8 horas de pura paja, y por supuesto, el ocio, el hambre o el sueño, propiciaban el chalequeo. Los camarógrafos de la ANTV son un caso. Los diputados de oposición escribieron 52% en hojas blancas. Cuando se hablaba de la 4ta o se acusaba a la derecha de algo, la orden era ponchar a la bancada opositora, entonces algunos diputados mostraban el papel, y los camarógrafos quitaban la cámara, volvían y les hacían lo mismo, se los vacilaron un buen rato.
El otro caso es la imagen que ilustra este artículo cortesía de Julio Borges. Estoy totalmente de acuerdo con el estado en facebook de Panfletonegro ayer: “Honestamente, lo que hizo Julio Borges es lo más punk que se ha hecho en el parlamento” y yo agregaría, lo más venezolano. Sí, las greñas de Iris, fueron lo más real durante las interpelaciones.
Nota: ya sé, Soto Rojas es el Yoda de la revolución bolivariana, resuelto el misterio. De nada.
See you around people