Que desatino del tiempo en mi destino
al encomendarme ingenuo
a tu luz de cielos, a tu corazón mezquino
que hace mucho admiro en mi vagar continuo
Que ilusión intoxicante alimenta mi alma
al creer poder realmente amarte
dandole forma a mis versos, quitandome la calma
mientras otr@ va con sus besos a embriagarte
Que tonto y candido pensar
en mover mi mundo al lado del tuyo
obviando la gravedad, obviando las distancias
con un falso aliento que se volvio murmullo
Que elasticas ideas
que infinita e infantil imaginación
hizo rodar mi cabeza por la insomne noche sin estrellas
dandome esperanza donde solo había quimera e ilusión.