Una de las mejores decisiones que ha hecho mi Mamá ha sido la de darnos carro a mi hermano y a mi a los 22 años, a lo mejor si me lo hubiese dado a los 17 ya estaría muerto ¿Quién sabe?.
Ahora tengo 24 años, y uso de forma moderada mi carro, de la UCV al trabajo a mi casa y a casa de mi novia que vive en Maracay, pero hay un fenómeno que he estado viendo y mentando madre es cuando me toca salir con el carro de noche.
La cantidad de gente INCONSCIENTE que vive poniendo las luces altas, así sea en el estacionamiento del Centro Comercial, o que van por la cota mil o por la misma regional del centro, hay que ser bien bruto para dejar eso prendido a cada rato, cómo si estuviéramos en Islandia, o en Inglaterra que viven con nieve y el cielo gris.
Todos sabemos que en Venezuela tenemos autopistas enhuecadas oscuridad ya que no prenden los postes, pero cánchale, tengamos un poco de conciencia, no hay necesidad de derretirnos las corneas mutuamente solo porque «no podemos ver» yo siempre voy con mi carro con mis luces normalitas y nada me ha pasado.
Si lees esto, y eres una de las personas que viven con las luces altas
¡Bájale dos!.
El problema va mucho más allá de las luces altas. Son los fucking HiD (o como se escriba) lo que me funden las retinas al manejar de noche. Lamentablemente, este problema se incrementa de manera casi exponencial: Para contrarrestar el destello de las luces HiD, cada vez más personas instalan luces HiD en sus carros, lo que hace que más personas se vean afectadas y decidan hacer lo mismo (repetir ad infinitum).
El caso de la Autopista Regional del Centro (y muchas, muchas autopistas en Venezuela) es que la falta de luz practicamente obliga a los conductores a poner las luces altas. Y aquí se repite el ciclo: para evitar enceguecernos con las luces altas que vienen, la «solución» es ir todos con luces altas.
Si analizáramos este fenómeno como experimento sociológico, la lamentable conclusión es que somos un hartajo de egoístas.
La mejor solución que he encontrado es limitar mis salidas nocturnas. Entre la delincuencia, la falta de luz, y los anormales al volante, más vale prevenir que lamentar ¿no?
Siempre me he preguntado lo mismo. La autopista regional del centro es una de las peores pero al menos es amplia y de doble vía y los accidentes por retinas encandiladas pueden reducirse. Un infierno es cuando se te ocurre ir a oriente. Todavía la vía principal es una carretera. A mí siempre me toca ir de noche, y varias veces he pensado hasta aquí llegué. Es cierto porque usar luces para niebla, aunque las carreteras estén oscuras no se justifica.
Pana, he visto hasta motos con esas malditas luces HID. Hasta carros que de vaina y ruedan, con luces de esas. El clásico snobismo veneco.