El tema tal vez ya haya sido machacado, pero quiero dejar mis impresiones sobre el mismo. Veamos. En Enero, Mario Silva vaticina que no habrán elecciones primarias de la oposición, y uno de sus contundentes argumentos es la solicitud hecha al CNE para que apoye logísticamente a la jornada electoral. Según su lógica, la oposición no podrá trampear los resultados, así que preferirá anunciar un candidato de consenso antes de caer en la evidencia de poder movilizar como mucho 500.000 personas. Amorim refuerza el alegato diciendo algo como que «no van a poder entrar a la sala de totalización a cambiar los votos» .Ver video
El domingo en la noche, ante la evidencia de la abrumadora (para ellos) convocatoria lograda por la MUD, anuncian un fraude. Esgrimen una teoría chimbomatemática según la cual, dado el número de máquinas presentes en el proceso y el tiempo promedio de tres minutos por votante, podrían votar a lo sumo 1.4 millones de personas. Sin detenerse a pensar que si hubo un fraude, fue avalado por el CNE, el mismo organismo que anteriormente habían ensalzado como el adalid de la transparencia. Eso lo hace el ancla «estrella» del canal, el que debe tener mayor rating en esa planta.
Ellos saben que lo que dicen no tiene el mayor sustento; sin embargo, lo dicen. La falta de respeto hacia su audiencia, la asunción de imbecilidad de la misma de la que hacen gala, es nauseabunda. Creo que la dirigencia de ese canal debería pensarse bien las consecuencias de tener un programa de tales características en su parrilla. Pero no lo van a hacer, su mediocridad no les permite ver más allá.