En el 2004 me tropecé con este cantautor en medio de la euforia del Gang Bang, la primera vez no le preste mucha atención pero casi al final del 2006 salió un disco doble de la mano con Enrique Bunbury llamado “El tiempo de las cerezas” en ese disco me conseguí con un cantante trágico y de voz casi temblorosa, con canciones llenas de un gran argumento literal que yo solo había conocido con Bunbury y otros cantantes que no pienso nombrar. Al prestarle atención a la primera canción que se llama Días Extraños conseguí “eso” y algunos sabrán de lo que hablo, y luego con otra canción llamada Bravo descubrí esa rabia, arrebato y melancolía que muchos llevarnos por dentro pero no sabemos expresar, me conseguí con un despechado empedernido, despechado de la vida, el amor, la gente y que luego descubrí su mundo lleno de oscuridad, letras, canciones y muchas drogas y rece a dios por ser por lo menos la mitad de bueno como él.