La fe descalza
Tu pregunta atrapó mi historia como el eco que se repite en el silencio.
Siempre lo mismo, no estoy en contra de que tú creas, entiende que yo no.
Yo soy yo y no tengo fe, mi propósito en la vida es vivir, no me identifico con palabras que parecen creadas para que el erudito las voltee, que más da si piensas que con el significado me obligas a reconocer lo que no se, al final te convences a ti mismo de ser la razón pero a mi no me llegas con tu pasión.
Mi mente es mi prisión, no me deja caer ni arrastrarme en el delirio, siempre busco debajo de mis ojos lo que a través de ellos no puedo ver.
Si la vida es una caja yo abriré un hueco para saber que hay detrás y si la caja está dentro de una esfera la rasgaré hasta agotar mi aliento, por que siempre habrá otra forma que contenga la anterior y yo funciono creando espacios que me permitan conocer que hay mas allá.
No me gusta tu Dios, tiene los peores vicios del hombre, desea ser adorado, castiga con la sangre y el mejor premio que se le ocurre es que mueras para seguir adorándolo (no es muy original que digamos, esas cualidades las tienen todos los seudo líderes).
Tengo los mismos sentidos que tú, cada uno camina hacia mi mente dopándola con sensaciones y como tú los empleo para tener satisfacciones.
Cuando algo está mal tú rezas, yo tengo que pensar como usar lo que se para salir adelante o reconocer mi impotencia y dejarlo atrás.
Tu fe tiene zapatos finos, caminas dejando mentiras en las espaldas de tus iconos, yo en cambio camino descalza, se cuando no hice o no quise y lo asumo.
Te agradezco no me ofendas con vírgenes, primero dime quien le abrió las piernas a la dama para corroborar la teoría y segundo ser madre es un orgullo que no cabe esconder con metáforas, desde dentro nace la vida y deja secuelas que son banderas de conquistas y alegrías, es aberrante una imagen que no dice nada, que no tiene nada, que no siente nada…
¿Y de donde vengo? Del mismo lugar que tu Dios, ese mismo espacio de tu mente, puede ser que no esté aquí y ser solo una aparición.
Si, estoy molesta, me preguntaste y luego huiste, como si un pensamiento opuesto fuese un crimen y no una opción.
Como muchos caminan asidos a las muletas de la fe, no se puede decir nada negativo, supuestamente por respeto, lástima que no se escuchen cuando escupen su ignorancia sobre uno, creando barreras y cerrando puertas.
Total yo entiendo que por mucho que viva no voy a saber mas, solo seré mas lista, me gusta mi incultura, me crea puentes a la imaginación y en los recesos oníricos transforma mis miedos, no soy mejor que tú, se que también soy ignorante, pero a mi falta de conocimiento no le llamo Dios, me reconozco, soy indiferente y me asumo, mi culpa me pertenece, no la vacío en la conciencia ajena.
Ahora no me respondas, piensa, yo no ocupo tu espacio, no invadas tú el mío, no seré quien diga que en realidad tú no crees, no seas tú quien pretenda que yo si.