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El sueño de hacer cine

Quizá haya llegado el momento en que la imaginación esté próxima a volver a ejercer los derechos que le corresponden

-André Breton

De todas las ramas artísticas ‘el cine’ sin duda es la más completa, no sólo se tiene que saber de literatura para escribir un buen guión, también se tiene que saber de fotografía y antes de pintura para crear una iluminación acorde a lo que se quiere expresar, del mismo modo tener conocimientos de audio, pues con una buena combinación audio-video; se consigue la experiencia de atrapar al espectador llegándole a dos de sus sentidos y con un buen esfuerzo, engañar a los otros tres.

A todo artista le gustaría cambiar el mundo, pero teniendo ya alguna experiencia en mi corto paseo por la vida sé que es una tarea casi imposible, sin embargo al hacer una película, el autor tiene el poder de imaginar un lugar mejor y si logra proyectarla, hace que miles de personas lo imaginen con el.

Una película inspiradora para los que quieren hacer cine es la cinta italiana “Cinema Paradiso” porque en ella se resume la pasión y el esfuerzo de dejar una vida atrás para realizar un sueño, además de todo ese bagaje del director sobre su lugar de origen y la magia de aquel pueblo postguerra, casi invisible para el resto de Italia.

Otra película que enamora, y hace pensar que es posible capturar el encanto, la frescura y la actitud desinteresada de un personaje fue “Amelie”, pues en ella todo está lleno de pequeños detalles y una personalidad de sublime timidez y carente de realidad.

Nombrando algunos logros latinoamericanos que cambiaron la historia y la manera de hacer películas que hablen de la pobreza de una forma magistral fue “ Ciudad de Dios”, que demostró que se puede salir del esquema predeterminado y aunque sea una trama repetida en estos países, es posible ir más allá.

El cine es un arte y una industria de masas, que sirve para interactuar con el espectador, que hace que la gente sueñe y experimente sentimientos propios y ajenos.

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