La manera en que pensamos hoy en día es objetivista, dominadora y posesiva. Es un afán incontrolado de dominio sobre cosas y sobre personas, los cuales nos lleva a la manipulación.
Llevando a incrementar el desconcierto espiritual de una sociedad que perdió el ideal, que busco durante siglos y no logra descubrir un nuevo que sea mas conforme a la naturaleza humana.
» No basta vivir en un régimen democrático para ser lideres de verdad «