Ejercicio a 4 manos con Fedosy Santaella: Belleza Vol. 2

La misma mecánica: Describir bellezas y no utilizar la palabra «belleza».

Si el ejercicio anterior, con José Urriola, hablaba de bellezas específicas, este ejercicio podría ir de bellezas cotidianas, o como dice Fedosy:

Jugando al ahorcado con la b_ _ _ _ _ a

Una mujer que se masturba, sola o acompañada, boca arriba o boca abajo, o en cuatro. En su cama, o en un sofá o en una silla (frente a un video porno de computadora, preferiblemente lésbico). En el silencio de la mañana; se vale también de tarde, en el silencio de la tarde que comienza; o de noche, en el silencio de la noche… que comienza.

F.S.

Adiós

No hay nada más serio que el adiós y sin embargo lo podemos incluir en este ejercicio. Estamos obligados a las despedidas, pero no es un acto de voluntad sino de paciencia. Pero si en algo ayuda el adiós es a poner todo en perspectiva, a mirar hacia atrás, a encontrar una línea de tiempo que uno todos los eventos, miras el todo cristalizado de lo cual te despides, y de repente, sientes un raro agradecimiento, una sensación que solo el adiós, y nada más que el adiós, conjuga. Y ahí está, ahí lo ves, y era necesario y era inevitable, y por un momento dejó de ser triste o serio, y fue hermoso, a su manera.

A.P.B.

Causa perdida

Uno se monta en estos inventos y es inevitable citar, es un deber. En este caso, una de mis frases favoritas, tal vez la más. Sobre todo por el contexto, viene de mano de El Negro Fontanarrosa, en boca de Boogie “El Aceitoso”, imagínalo, con la cara de malo, con el cigarro eterno en la boca, diciéndole a su primo, Ultra, “con algo que en otros podría llamarse cariño”, la siguiente joya:

“Terminarás muerto defendiendo una causa perdida, o enamorado. No sé qué es peor»

Sí, esos dos crímenes, son más cotidianos de lo que se puede suponer.

A.P.B.

Complicidad

La buena, no la que se confabula para dañar a alguien o algo. La buena, esa que sirve de base para sostenes cualquier amor. La complicidad es lo más cercano que estamos de la telepatía. Se hace de miradas, gestos de todo tipo, de señas imposibles. La complicidad viene después, necesita tiempo, y es lo contrario a la decepción o al desamor. La complicidad es una conquista. Verla, cuando es auténtica, un espectáculo maravilloso.

A.P.B.

Decadencia

Me van a perdonar el Frances, pero venezolano que no vea el título de este ejercicio en la decadencia, está bien jodido. Bien jodidos, si no entrenamos el ojo para advertir su cruel hermosura.

Ya las nociones básicas de tiempo no aplican aquí, en nuestro caso. Somos el sueño de un sueño en el fondo de un río turbio e indescifrable.

Y un poco más jodido, si tienes la edad suficiente para recordar algún esplendor.

A.P.B.

Hermosa ignorancia o E. E. Cumings

Que la hermosa ignorancia (alabada sea la ignorancia ígnea, ese fuego) te permita ir descubriendo poetas y poemas. (Que todavía la poesía te sorprenda, que la poesía te siga enseñando que vale la pena, que de la poesía uno no se canse.) Hace poco descubrí a E.E. Cumings (o a e.e. cumings (como prefieras)). Aquí, para seguir con la onda de transcribir poemas, te dejo uno del poeta:

l(a
le
af
fa
ll
s)
one
l
l
iness

F.S.

Hijos

Mirar a tu hijo dormir, cargarlo, aunque ya sea todo un manganzón, llevarlo a la cama, arroparlo, darle un beso de buenas noches, rogar por él, rezar por él, morir por él y seguir vivo sin embargo para cuidarlo.

F.S.

Hugo

Los gatos, mi gato, mi gato que murió (y que se llamaba Hugo, pero no por el Presidente), y que me esperó para bufarme (para regañarme) por última vez, para dejarse acariciar, por última vez, y luego morirse (por séptima vez y para siempre jamás). Mi gato, los gatos, la gente gato.

F.S.