Para Teodoro es un libreto repetido. El Presidente volvió después de nueve largos días de ausencias y especulaciones sobre su estado de salud. Vacaciones pagas en Cuba( donde muchos colegas del cine criollo también viven su mar de la felicidad).
Parte de su estrategia de campaña de cara a las elecciones regionales.
Regresó a una semana de los comicios con la idea de aplicar su operación remate, levantando brazos y hablando maravillas de sus candidatos paracaidistas.
Se vienen unos días complicados para el país. Mientras tanto, el chavismo celebra la bienvenida como si se tratase del advenimiento del niño Jesús. Pero no se confundan.
Su nombre es el Grinch y llegó para arruinarnos la navidad.
Bienvenida la mala pava.
Ni hablar de Lucio Quincio y Marquina. Deben ser del comando del PSUV. Le hacen el juego de «todo once, tiene su trece».