Desde muy chico he sido pacífico y tranquilo, rara vez fui propenso a las peleas, y viéndolo desde esta distancia creo que fui víctima de bulling escolar. Por lo que soy muy poco aficionado a todo lo que sea pelea o discusiones, eso incluye las «tánganas intelectuales» como la que se dio en el post de Sergio «Lo Bueno de Venezuela: Porque para Panfleto todo en el país es Malo «.
Una vez le escuché a un profesor de psicología social que los mejores grupos son los multidiversos, porque de esa multiplicidad de puntos de vista se podría llegar a conclusiones trascendentales, es decir que de un grupo en el que todos sean, por ejemplo, «marxistas-leninistas-guevaristas-maoístas» no es mucho lo que se puede sacar. Una de las tantas razones de porqué me gusta leer y escribir en PanfletoNegro es por su múltiple diversidad de personas que escriben y comentan acá, que provienen de muy distintas «tribus», pueden haber anarquistas, comunistas, liberalistas, críticos literarios, críticos de cine, críticos de política (o se las dan de), poetas (por cierto, tengo mucho que no leo un poema acá), homosexuales, transgéneros, cristianos, budistas (en mi caso), ateos, científicos, periodistas, y muchos que no tengo idea qué son pero que igual los leo.
Cuando en la universidad, o en una tasca, o en la casa de un amigo, se formaban esas habituales «tánganas intelectuales» o con cierto eufemismo «debates políticos», yo por lo general me replegaba, y sí tenía oportunidad hacía mutis.
Rara vez participo en debates en PanfletoNegro, ya que rara vez tengo la intención de convencer a nadie y son muy pocas las veces que creo que tengo la razón, pero a veces sigo, «de lejito», algunos debates que se forman acá que en ocasiones se vuelven interesantes, aunque pocas veces estoy de acuerdo con lo que se dice. En el caso del foro que se ha formado (se está formando) a partir del post mencionado anteriormente, el que pudo haber sido un foro interesante es ahora un ente informe, una «cosa», que se rumia a sí misma con dientes de piraña. Los egos están en su estado más puro, si es que se le puede encontrar pureza a los egos. Al parecer se ha mostrado el Mr. Hyde de muchos de los panfletarios de acá. Aunque yo no digo nada, en ocasiones he mostrado mi Mr. Hyde también en otros foros de esta página, pero creo que he reaccionado antes que el foro se vuelva un patuque. Y este foro desde hace un buen rato que se empatucó, y bien feo.
Y claro, la culpa es de «ese guevón que se la tira de la gran vaina», o en todo caso de la vaca. Segurito que el señor Gibarian dirá que esto es una falacia del hombre de paja o alguna otra falacia, quizá he incurrido en falacias desde la primera línea, si es así pues disculpen, no sé mucho cómo se escribe, escribo lo que pienso y siento, y si acaso me fijo en la ortografía.
El punto es que, señores, de pana, dénse una pausa, una pausita larga, apaguen un rato la PC y pónganse a escuchar las cuatro estaciones de Vivaldi o Justice for All de Metallica, o dénse un paseíto por el Sambil, o por el Parque del Este, o simplemente cierren los ojos y respiren, y ya, o lo que sea. A lo bien.
No joda, renji,No seas tan carajita. Cual es tu peo, ¿te crees mejor que los demás con tu sabiduría hindú? Aquí no caemos a coñazos quieras tú o no, faltaba más. Anda con tus falacias pajúas a un templo hare krisna a ver si te paran bolas allá.
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Que va, no es mi estilo. Concuerdo contigo, ese hilo entró en una escalada demasiado violenta, y tal vez se dijeron cosas al calor de la discusión que no han debido decirse. Espero no haberte molestado con el intro.
Jejeje…. Tranquilo Mirco, tu intro me dio mucha risa…
Y yo que entré pensando que Mirco finalmente había estallado.
Estoy de acuerdo, seguiré tu consejo. Un abrazo.
@Renji:
Qué alivio, después de escribir pensé que tal vez te habías molestado.
Renji, coincido y discrepo contigo.
Estamos de acuerdo en que esa, al igual que muchas otras discusiones, terminó en una improductiva batalla de los egos. El asunto es que eso es ya de por sí complicado de evitar o prevenir en la vida real. Ni hablar de en un foro de internet donde además se cuenta con el anonimato. La línea donde termina una fuerte convicción y donde comienzan el ego y el orgullo es bastante borrosa.
Yo personalmente no tengo ningún problema con que en Panfleto se den unas atajaperros cada cierto tiempo *siempre y cuando el asunto no llegue a niveles violencia física y/o verbal que generen un daño irreparable*. Más bien lo veo como parte de su caótica forma de auto-regulación. Algo así como un instinto colectivo de supervivencia, en su versión más bruta.
Porque, si algo queda claro en estas caimaneras intelectuales, es que para muchos aquí no hay vacas sagradas. Eso de alabar o apoyar cualquier cosa por amiguismo, por algún privilegio imaginario de antigüedad o por puro interés (que es lo que normalmente espetan quienes desconocen la página y se sienten aludidos por un artículo de acá) aquí se da poco. Y eso es excelente.
Claro, lo ideal sería que las divergencias se ventilaran de una forma menos confrontacional. Y si a esas vamos, yo también quisiera que el mundo se adaptara a mis necesidades, prioridades y valores a la perfección. Y ganarme los $60 millones del lotto esta noche.
Pienso que no es posible que, en una página que da las libertades que esta da, las discusiones vayan a desarrollarse sin ningún tipo de conflicto. Como todo en esta vida, siempre hay un trade-off. En Panfleto ese trade-off existe entre la libertad de decir lo que te pasa por la cabeza y ponerle orden a la pea. Por más auto-control que ejerzamos, nunca vamos a controlar lo que el otro diga a menos que haya alguien con poder de moderación.
Yo en lo personal, prefiero leer cosas que me puedan ofender y lidiar personalmente con ello a que un moderador decida qué es o no ofensivo para mi. También prefiero leer un escrito de alguien que genuinamente expresa lo que piensa y siente que leer el escrito de quien que busca satisfacer los requisitos arbitrarios de un moderador.
Hay quienes ven sólo lo negativo de esta última sampablera, pero yo veo cosas rescatables. Me parecen positivos comentarios como el de Frank, donde comenta que difiere de personas con las que generalmente está de acuerdo y coincide con personas que le caen pesadas. Eso se llama honestidad intelectual y es algo que todos debemos practicar con mayor frecuencia.
Por más repetitivo y fastidioso que pueda parecer Gibarian, para mi es excelente que haya alguien señalando lo intelectualmente deshonestos que somos. Porque independientemente del contexto, la única forma de tener un debate medianamente productivo es por lo menos tratar de ser honestos y coherentes. De hecho, prefiero una discusión argumentada en la que se usen calificativos, que un debate aparentemente ascético en el que subestime la inteligencia de los participantes. Y quien usa falacias lógicas en lugar de argumentos está precisamente subestimando la inteligencia de su interlocutor.
*Un dato para quienes les fastidia cada vez Gibarian dice ‘hombre de paja!’. Dejen de distorsionar los argumentos de su interlocutor.
**Otra alternativa puede ser crear un juego en el que nos tomamos un trago de ron fondo blanco cada vez que Gibarian dice ‘hombre de paja’ o ‘ad hominem’. Si dice ‘tu quoque’ son dos tragos. Si dice ‘ad baculum’ es la botella completa.
En mi opinión, si queremos que Panfleto continúe siendo un sitio ‘alternativo’ donde se ventilen abiertamente diversas visiones, tenemos que aceptarlo como el perro traicionero que puede ser a veces. Capaz de morder las manos que lo alimentan. Y hasta se come alguna de sus crías si anda de malas pulgas.
Yo personalmente se lo celebro y lo seguiré azuzando cada vez que pueda.
Warholio, de acuerdo contigo, eso de que no hayan vacas sagradas ni solidaridad automática me parece de lo mejor que tiene panfleto. ¿Ven? no era tan difícil buscarle la vuelta a los hombres de paja de Gilbarian, con alcohol todo mejora.
@warholioWARHOLIOwarholioWARHOLIOwarholioWARHOLIOwarholioWARHOLIO: Creo que en esencia estamos de acuerdo, el tema es que, a mi modo de ver, a muchos se les volaron los tapones, y en ese estado, cualquier cosa que se diga es torpe.
Desde luego tampoco quisiera un moderador-policía diciéndonos qué escribir o qué no, perdería toda la esencia de la página, pero acá como que todos desde hace un buen rato que dejamos el acné. Parte de lo que quise decir en mi post es que hay que saber cuándo retirarse a tiempo antes que el asunto se vuelva incontrolable, que en este caso muy pocos supieron cuándo retirarse a tiempo.
Pero en fin, al parecer hay un deseo inherente en el ser humano de buscar camorra, o que le gustan las camorras, debe ser por eso el rating de programas como Laura en América o Quién tiene la razón, qué sé yo.
Sin ánimos de hacer de psicoterapeuta ni nada por el estilo, pero nunca me quedó claro cual fue la causa del disgusto de Sergio M. En lo personal, a mi me ladilla el tono socarrón de los artículos de Ruben Rojas y compañía, pero más allá del tono pretencioso tienen algunos puntos que valdría la pena conversar civilizadamente.
Venezuela, como cualquier país del mundo tiene sus cosas malas y buenas. Creo qOrgulloso? La cosa no da para tanto. Viendo a quienes nos gobiernan por decisión popular es difícil sentirse orgulloso. La música llanera me da vergüenza y
Creo que antes de dejarnos dominar por impulsos maniqueos – tan de moda en nuestra república bolibanana – deberiamos tratar de buscar los puntos en común con el interlocutor. A menos que la persona con la que hablamos sea un troll o un imbécil. En esos casos es mejor irse y no perder tiempo discutiendo.
Sin ánimos de hacer de psicoterapeuta ni nada por el estilo, pero creo que todo comienza por tratar de comprender cual es el punto de partida del otro.
Primero: es evidente que Laureano Marquez no trata de hacernos consumir el Soma chovinista que somos el mejor país del mundo o que se yo. Honestamente, en un principio resistí leerlo porque «orgulloso de ser venezolano» es algo que me da alergia. No obstante lo leí. Y el mensaje es claro: la vaina está jodida, pero hay vainas por las que vale la pena luchar. Con lo único que disiento es con el uso liberal de la palabra «orgulloso».
Por otra parte Ruben Rojas y sus colaboradores andan entregados a la nota nihilista de no dejar títere con cabeza en Venezuela, como lo muestra su crítica al chovinismo local en un artículo reciente y esta respuesta al artículo de Laureano. Las vainas están jodidas y no hay que ser un observador excepcional para ver lo que está jodido. En lo personal me da ladilla el tono socarrón del artículo, pero concuerdo con su crítica al chovinismo y esas frases huecas al estilo de «somos el mejor páis del mundo».
También creo entender la reacción de Sergio M. La gente le cayó en cayapa en Laureano – entre ellos el cuarteto de Ruben R. y colaboradores – y al todo el asunto le pareció una canallada. Como mencioné antes, creo que el único error de Laureno fue su uso liberal de la palabra «orgulloso», pero me parece un buen esfuerzo y creo entender el artículo de Sergio M.
En cuanto a los comentarios al artículo de Segio M., bueno. Parece sacado de ND. Los comentarios valiosos se pierden entre tanta histeria sin sentido.
Creo que antes de dejarnos dominar por impulsos maniqueos – tan de moda en nuestra república bolibanana – deberiamos tratar de buscar los puntos en común con el interlocutor.O al menos intentar ver de donde viene. A menos que se trade de un troll o un imbécil. En esos casos es mejor irse y no perder tiempo discutiendo.