En mi opinión esta devaluación no tiene mucho que ver con la escasez, el sector privado, etc. y sí mucho con el hecho de que la deuda exterior venezolana (y los intereses que se tienen que pagar por ella) ha llegado a niveles insostenibles para el actual nivel de ingresos de la nación. Como esta deuda fue emitida en dólares se tiene que pagar en dólares quedando muchos menos de los verdes para el gasto ordinario. Siendo que el Estado es el mayor empleador del país, además del mayor constructor, agro-productor y un largo etc. necesita más bolívares para menos cantidad de dólares. La devaluación era la única opción.
Reestructurar la deuda no es una opción. Hacer default tampoco, este régimen ha demostrado que primero pone a comer mierda a la población antes de que a un bolijediondo le nieguen la visa o no le dejen entrar en un tres estrellas Michelin en Paris. Hoy por hoy nadie le presta a Venezuela a cualquier nivel de tasas de interés. No solo las reservas de oro están en las bóvedas del BCV al cuidado de unos zorros como si de gallinas se trataran sino que además la producción petrolera, que es lo que provee el 94% de las divisas que entran, no solo está comprometida como dación de pago por otros préstamos que esta ex-república ha tomado sino que además la producción petrolera ha venido declinando en los últimos 14 años.
El panorama es bien sombrío. Estoy absolutamente seguro de que la escasez no va a mejorar con el agravante de que la inflación se disparara. Quizás, si se aclara el aspecto político y hay elecciones fundan unos cuantos lingotes de oro y los suelten a la calle para asegurar la elección de Maduro. De lo contrario lo que queda es rezar para que el petróleo suba cuestión que no es descartable dada la cantidad de liquidez en dólares que hay en el mundo y que termina por inflar todo los “commodities” y “real assets” denominados en esta moneda (la mayoría). Esto traería dinero fresco y quien sabe hasta se pudiera emitir nueva deuda y correr la arruga. Pero realísticamente este será un año complicado a nivel económico, bueno somos de hecho de la noche a la mañana un 50% más pobres.
Esta economía es una absoluta ficción no porque el Estado intervenga con políticas, regulaciones, expropiaciones, etc. Es una completa ficción porque el mecanismo de fijación de precios lo define un carajo o unos carajos desde un escritorio creyendo que la ley de la oferta de la demanda, como toda ley en este país, se la puede violar impunemente y luego los leguleyos del TSJ arreglan y parapetan la vaina. Todos los países tienen políticas económicas y las aplican pero luego le dejan al mercado, es decir a la oferta y la demanda, que fije los precios. Aquí no, aquí es lo contrario de hecho. No hay ningún tipo de política económica sino la que le salga del forro al pran mayor (“¿y esto que está aquí?, ¡exprópiese!”) y luego cuando se dan cuenta que el sol siempre saldrá al día siguiente afectan el tipo de cambio que es lo que a la final mueve a esta economía.
No solo eso sino que la inseguridad llegara a nuevas cotas macabras como ya lo estamos viendo en este mes y medio del 2013. Inflación y crimen van de la mano con el agravante de que todo el kit de un malandro es importado. Desde las maquinitas para hacer balas hasta las Glocks. La pólvora quizás se las faciliten desde Cavim. El incentivo para robar dinero y mantener el capital de trabajo de la Malandreria Inc. serán mayores.
Este quizás sea el último apretón de tuercas antes de entrar al último nivel en este videojuego llamado Revolution.
http://patanium.wordpress.com/