Gift cards de Amazon, colas para comprar electrodomésticos, son algunos de los animales del Zoológico Devaluación. Los que no viajan no ven los dólares, pero saben que si los tocan, los precios se mueven.
Los opositores hablan de libertad económica mientras gastamos lo que queda de los 400$ del cupo electrónico. La mayoría de los chavistas se callan, o dicen que esto no es propiamente un paquetazo porque aquellas devaluaciones eran las malas y esta es de las buenas. Casi todos sufren la escases y el cansancio va por dentro.
Los que saben de economía dicen que trata de dólares, inversiones, capitalistas, anti-imperialistas, trasnacionales, soberanía, especulación y esas cosas.
La economía real es básicamente división de trabajo. Yo hago mesas, tu siembras maíz. Nos sentamos y comemos cachapas.
En Venezuela nos sentamos en una mesa, y discutimos sobre a quien debe tocarle el maíz. Mesa y maíz vienen de afuera.
Por supuesto que tenemos que hablar de a quien le toca el maíz, que nos llegue a todos, y que además tengamos educación y salud. Pero al final tiene que haber maíz.
Es muy mala idea producir en Venezuela. La única razón es hacerlo por razones políticas, o porque tengas amigos políticos, o porque tienes tiempo haciéndolo y eres inmortal (léase Polar).
Esto es una piñata. La gente toma lo que puede, y después con una cerveza o un whiskey discute sobre como tener un mejor país.
El chavismo que se cree más puro ha insistido en que nos gastamos los dólares en iPads y lujos, y que el problema es que somos consumistas.
Es verdad que en el mundo no caben tantas iPads. Es cierto que si todos producimos tanta basura como producen los ricos, nos tendríamos que mudar de planeta.
El único camino víable para toda la humanidad es que tengamos que ser más austeros. Eso no se traduce a no tener iPad, el que pueda. Pero de algún modo hay que cuadrar las cosas porque no tenemos otro planeta a mano, y el que tenemos es para todos.
Pero que me cuenten historias si les llega a faltar una medicina, y no la consiguen, que está agotada. En ese momento no se les olvide Cadivi. Porque esa gente vive de vender medicinas. Si pelan ese boche es porque no pueden.
Lo de la devaluación no es un tema de especuladores, ni de variaciones o eliminación de Cadivi.
El tema central es que ni nos damos de comer, ni nos damos de vestir, ni hacemos nada más que mover los dólares petroleros por todos lados.
Eso se llama rentismo, y es la maldición que padecemos desde que esta teta da leche negra. Hugo Chávez y Carlos Andrés Pérez son dos espinillas comparados con toda la forma en que está hecha nuestra economía.
Más aún, la renta petrolera nos hace incapaces de saber cuando un gobierno hace poco o mucho con el dinero que tiene. No logramos entender que pasa si el petróleo está a 80$ por barril.
Mientras sigamos pensando primero en el petróleo, seguiremos así.
Propongo que los próximos partidos, después que la historia barra a los de esta generación, incluidos el PSUV, tengan en sus siglas las letras W y la X.
Para variar.