Escribir sobre el nuevo álbum de La Vida Boheme con imparcialidad es un ejercicio de paciencia. Como pasa con todas las entregas consiguientes de artistas autóctonos que lo han «logrado» en nuestro país, pero muy especialmente afuera (ver Edgar Ramírez para más información), la reacción de nuestro público viene acompañada de un apasionamiento tan chovinista que muchas veces no permite una lectura sensata del objeto en cuestión.
«Será» tiene apenas unas horas que fue publicado en YouTube por Discos Caracas, las visitas están creciendo rápidamente. Los videos ya se están llenando de fanáticos fundamentalistas que se cortan las venas y se bañan en pintura por el grupo. Es normal ver a un mismo usuario derritiendose en alabanzas en los comentarios de todos los videos, y calificando como SPAM o negativo a cualquiera que se atreva a comentar algo que no sea en pro de la banda.
Alguien se atrevió a decir que una canción se parecía a algo de MGMT. Si bien es una conclusión un poco provocadora, no era totalmente descabellada. Su comentario fue censurado, al señor@ casi se lo comen vivo y le responden con esta joya de la argumentación:
Predominan comentarios como:
Le dedico tanto espacio a esto porque honestamente sé más de crítica que de música y es preocupante cada vez que esto sucede. Entonces si uno está en desacuerdo, empiezas a creer que tienes que estar loco. Pero más importante, esta conducta sesgada se convierte en un obstaculo para el progreso de nuevas ideas y la reflexión.
Puede que sea un comportamiento bien intencionado, como lo es comentar en las fotos de Capriles «Qué bello el flaco!!!», pero siempre hay mucho más allá que merece ser señalado. Seguramente hay faltas, y no sólo por ser venezolano o por elever el nivel de producción merece una aprobación absoluta.
Ajá. Está bien, cállate ¿Es bueno el disco?
Será es uno de esos álbumes que necesita ser escuchado muchas veces para poder ser apreciado, no estoy seguro que lleve suficientes. Le he dado unas cinco vueltas y mi impresión hasta ahora es que está bien.Tiene momentos buenos, pero en su mayoría no es nada notable. Algunos tracks tienen un inicio o un final brillante, experimental, mucho más arriesgado que cualquier cosa vista en Nuestra y son menos propensos a ser sentenciados a ser clones de Foals o alguna otra banda Indie americana. Pero ninguna pista me convenció por completo. Todas tienen algo que no funciona y es doloroso, casi como una oportunidad perdida.
Todos los ingredientes más estimados de La Vida Boheme se repiten aquí, las reiteraciones líricas, los griticos, las trompetas alocadas, las melodías electrificantes hechas para que la gente brinque en la plaza Alfredo Sadel. A esto se le unen ahora más referencias políticas, culturales y músicales propias de nuestro país. Son notables las influencias de la salsa o el merengue en canciones como «El Mito del Progreso», una de las que más disfruté. Es evidente que el grupo está buscando explotar esta crisis política y de identidad que estamos viviendo, el nombre de este último track lo evidencia. Pero sobretodo porque en la canción Henry se pregunta, con una insoportable dicción cafetalera, «¿Como va a seeeer la vida mejor?» y en una desafortunada coincidencia «Antena del cafetal, que soledad te hizo tan alta».
Hay cierto tufo de ingenuidad emanando de las líricas, y es casi mejor ignorarlas y dejarse llevar por la música. Cada vez que este grupo hace un esfuerzo revolucionario o anti status-quo, en mi opinión, fracasan épicamente y volvemos al disco rayado de los niños del este del este. Pero nos encanta ver nuestra nación reflejada en el trabajo de una banda exitosa, nos llena de orgullo.
Por eso tracks que se llamen «Cementerio del Este», «Hornos de Cal», «Viernes Negro», «Angelitos Negros», «Antes era mejor» probarán ser un éxito en nuestro país. Se alimentan de esta idiosincracia que anhela ser gritada una y otra vez y, por supuesto, llevarse un grammy. A veces, lo intentan demasiado para mi gusto, como meter un sonido del comercial de MAS (¡Puede pasar con confianza!) en un track.
Algunas canciones se alejan del frenetismo juvenil convencional de la banda, y empiezan a dar muestra de una mayor madurez músical, pero son escasas y me causan sentimientos encontrados. La Bestia es hipnotizante, poderosa, y al mismo tiempo poco imaginativa.
Quien diga que «Será» es un sonido totalmente nuevo, no está prestando suficiente atención a la música occidental en los últimos 20 años. No tiene por qué serlo tampoco, pero esta calificación (que ya he leido) es de lo más falso que se pueda decir sobre el disco.
En todo caso, su mejor cualidad es tomar estas corrientes que ya están probadas y revitalizarlas en el contexto de lo que es nuestro. Por eso creo que lo más interesante son los momentos es los que se fusiona con sonidos sureños.
La presentación en YouTube merece un reconocimiento especial. Hay algunas sorpresas en los videos y realmente me conmovieron, sobretodo el cierre del playlist, Ariadna, con esa melancólica imagen de un pequeño bote saliendo de cuadro. Es un esfuerzo plus que siempre es bien apreciado.
Conceptualmente, está tan redondo como Nuestra pero no menos fracturado.
Aquello hablaba de una rebeldía, falsa, pero rebeldía al fin. Será es la nostalgía de un país y la esperanza de un futuro mejor. Pero está tan desconectado de la problemática real que termina siendo un pequeño desastre.
¿Qué queda? Brincar. Gritar que el futuro funciona y hacernos los locos.
Lo único que te faltó hablar fue de que buscaron hacer un disco conceptual (tipo Pink Floyd) pero se les ve el desorden musical que tienen en la cabeza. Las únicas canciones rescatables de SERÁ son »Hornos de Cal» y »Aridna». De resto, le falta mucho por transcender y, como tú dijiste, desaprovecharon una oportunidad de oro.
Pues… de venir de Nuestra que tenía unos pedazos de temas como IPOSTEL, Nicaragua, Flamingo y el no tan nombrado Huxley la verdad es que Será me dejo con un mal sabor de boca, partiendo del hecho de que no logro encontrar ese sonido tan característico de La Vida Boheme que suena a una mezcla entre kraftwerk y lcd sounsystem, o al menos no tanto como en el disco anterior.. y las canciones la verdad es que… meh.
@eduardoalien
Así mismo, tienen un pasticho. Estan divididos entre dos mundos y les cuesta conciliarlos. Pero gustan igual :/ No sabemos nada.
@La Resistance!
La verdad es que yo no le veo tanto a Nuestra de LCD. Pero sí, también es mi opinión que Será tiene muy poco impacto. Y no es por ser atorrante, pero veía esto venir.
Acaban de tumbar el playlist de La Vida Boheme en YouTube porque tiene contenido de Cookman International, es decir, Nacional Records, es decir, la disquera de La Vida Boheme.
Y entonces ¿Quién demonios es Discos Caracas?
Falsa alarma gente. Lo bloquearon para los que estamos fuera de Venezuela.
Chamo, qué palazo de artículo. Lo suscribo completico. Es fascinante y aterradora toda esa histeria que se apodera de nosotros cuando algo medio funciona en Venezuela.
Lo peor es que los principales afectados son los receptores de dicha histeria, ya que seguramente LVB no buscan que los conviertan en los sucesores de Dudamel. Pero bueno, aquí todo tiene que ser así, ese esquema Amar/Odiar Ídolo/Villano, ese pensamiento básico y plano del que no queremos salir nunca.
Gracias!
Tal cual John. Un amigo me comentaba, en defensa de LVB, que siendo la temática del álbum tan local, eso decía mucho de la sinceridad de la banda cuando puede que sea contraproducente al intentar proyectarse fuera del país.
Yo no me atrevería a poner en duda su honestidad, ni la discuto. Creo que están tratando de probar que tienen algo importante que decir, aunque en mi opinión no fueron muy exitosos en el intento.
Lo que sí está clarisimo es lo que dices. No van a mejorar en la medida que la recepción siempre sea tan desmedida. Porque según la gente, todo está perfecto, maravilloso, sublime como comentó una chica en el video. Ja.
Este disco entra en la categoría underrated. La Vida Boheme es una buena banda claro es un recicle de todo el indie actual y nada nuevo dentro del rock.
Me gustó el artículo, suelo leer cosas que escribes en este blog y algunos como el que hablas de «Cómo Venezuela tumbó el negocio de la marihuana sin proponerselo», o algo por el estilo, me pareció genial.
Es bueno leer artículos de crítica, aunque no sea siempre de la buena, jajaja
Respeto completamente la opinion de lo que escribes y obviamente estoy en desacuerdo con varios puntos. Igual, no viene al caso resaltarlos ya que cada cabeza es un mundo y cada quien escribe de las cosas de la forma en que las ve.
Soy igual de crítico que tu al momento de leer, ver, escuchar o conocer algo nuevo. Es algo sano y natural.
Pero bueno, nada, el punto no era generar un comentario de respuesta a tu artículo sino mas bien saludar.
Gracias por haberte tomado el tiempo de escucharlo,
-Daniel
a mi la vida boheme no me quita el sueño y en general, ninguna banda venezolana¿que puedo decir?mis gustos son mas orientados al rock, y sencillamente zapato3 no me convence y aunque caramelos de ciaron me llegó a gustar en algún momento, cuando se hicieron mas famosos se fueron mas por el lado del rock/pop que a mi personalmente no me gusta; no los puedo culpar, sencillamente quieren hacer mas plata, son sus manos y sus instrumentos, que toquen los que les parezca mejor. Afortunadamente no dejo que el chauvinismo tome un papel primordial al escoger que ver, escuchar o consumir.
Excelente artículo. Tocas precisamente el fenómeno más retorcido y absurdo de la Venezuela actual: el chovinismo.
Tengo serias arcadas cada vez que veo esta masturbación infinita llena de orgullo y grandeza; el peo es que no tenemos ningún órgano genital. El fenómeno, como bien señalas, está esparcido sin reparo en la gran mayoría de la población venezolana. El pensamiento crítico se está dejando a un lado, entrando en acción una histeria ridícula ciega, que desemboca en malcriadez preadolescente cuando se tropieza con alguien que llega a criticar alguno de sus «trofeos» de la patria.
Que si las playas, que si El Ávila, que si la mujer más bella del mundo, que si el humor único del venezolano, que no hay gente tan amigable y feliz como nosotros, que si Caramelos de Cianuro, que si La Vida Boheme…
Es una arrogancia y fanfarronería sin ningún sentido, sin fundamento alguno. Que hace un daño espartano a la sociedad, a la autocrítica, al pensamiento crítico, a la superación colectiva como país, al no conformismo.
Todo está perfecto, todo está en orden. Hay que sentir un orgullo estúpido por accidentes naturales. A echarnos en la cama y disfrutar de pendejadas de las cuales ni somos responsables. A gritar a los cuatro vientos que somos superiores a cualquier país del mundo. A caerle a pedradas a todo aquel que de una crítica o manifieste desacuerdo en algo hecho en Venezuela. Un perro callejero caga y se llena la nariz de pupú luego: orgullo vinotinto.
No sé todavía si el disco es bueno o malo, pero vaya que sí conozco la conducta irracional e histeria de esos fans que comentas en el artículo. «Me pareció que en esta parte hubiese quedado mejor que no gritara…» «Psssssst, idiota, mamagüevo, ¿por qué no haces música tú y nos muestras, pues?»
A esos extremos tan absurdos se ha llegado…
Saludos.
uhm…
me agrada tu articulo, y suscribo plenamente lo del chauvinismo venezolano que es bien recalcitrante, porque o la vaina es sublime o es una soberana mierda, demasiado extremista diria yo…
y la Vida Boheme, a mi me agradan todavia, me parece que a veces estan demasiado sobrevalorados, pero todavia se medio comen el coco para ofrecer algo nuevo, que ya salio alguna vez hace tiempo atras, pero bueno lo intentan…
igual todavia me quedo con los mentas… esos panas son una vaina seria…
saludos bro muy bueno… vamos compartiendo
@Daniel De Sousa:
Gracias, pero me estás confundiendo con Sergio M., un colega y colaborador más frecuente de Panfleto Negro que yo. A él le quieres dirigir tus elogios.
Con respecto a lo de estar en desacuerdo, no hay problema. Aquí se le permite eso, es más, lo incentivamos.
@Gabriel Nuñez:
“Psssssst, idiota, mamagüevo, ¿por qué no haces música tú y nos muestras, pues?”
Este es un clásico de toda la vida para los que hacemos crítica de cine en Venezuela/ cine venezolano. Demencial.
Gracias, muy bueno tu comentario.
El artículo tiene dos puntos principales: Uno que tiene que ver con el disco y otro que absolutamente no…
Comienzo por el que no tiene que ver con la música: Estoy de acuerdo con que no se debe apoyar algo por el solo hecho de ser nacional, o hecho por connacionales. Sin embargo, puedo entender como para algunos representa un orgullo el hecho de que alguien haga algo medianamente interesante, porque no es algo común entre nosotros. No somos exportadores netos de talento, pero para no sentarnos a llorar, muchos prefieren endiosar a los 3 talentos que logramos exportar. Luego, ciertamente la vaina cae en el extremo «chauvinista» como acá mencionan.
Ahora, el que tiene que ver con la música; como músico amateur puedo dedcir que pocos músicos verdaderamente exitosos escriben para complacer audiencias, casi de la misma manera como el autor de este artículo no creo que lo haya escrito para complacer a nadie, sino para dar una opinión sincera desde su escritorio. Habrá gente a la que le guste el disco, habrá a quienes no; pero como dice el vocalista (creo que se llama Henry), lo hicieron de manera egoísta pues es la única manera en que la música es sincera. Dicho de otra manera, el día que un músico componga para complacer al público, puede que sea exitoso en términos económicos, pero no será un músico sincero, por ende su música será vacía (para muestra, escuchar todo lo que sale de la «Casa Estefan», reggaeton, o cualquier verga novelera).
Saludos!
@Eduardo:
Saludos
Con respecto a lo segundo, esa postura yo nunca la he entendido por completo.
No puede ser completamente egoista porque detrás de ese disco hay una disquera que quiere vender. Si la formula del éxito vino casualmente de la mano con la sinceridad del grupo, nunca lo sabremos. De cualquier modo, eso no los debe hacer más o menos cerrados a la crítica. Creo que muchos artistas «exitosos» también han prestado atención al feedback.
Obviamente no se trata de complacer a todo el mundo, ya quedará de su parte juzgar que opiniones es conveniente tomar en cuenta y cuáles no, según sus intereses.
Pero para mi, bandas como La Vida Boheme, de seguro hacen un equilibrio entre sus intereses propios y lo que le gusta a la gente.
Ellos más que ninguna otra banda venezolana actual.
Buenas tardes persona-que-se-hace-nombrar «Klaus Inspector», en primera instancia te digo que cuando leí la introducción de este artículo casi que quería aplaudir sola en mi cuarto así pareciera una loca… Porque sinceramente pareces ser casi el único que se da cuenta de este tipo de cosas que nadie ve o dice por miedo a que lo manden a callar o te digan wanna be gringo. De verdad que es INDIGNANTE la falta de noción o sensatez como dices tú que hay aquí en Venezuela, tanto así que pongo de ejemplo a «Los Mesoneros», que por tocar cinco acordes y salir en una propaganda de pepsi ya se les considera talento Venezolano o algo similar a eso, cuando son demasiado simples… Por supuesto que no se les puede quitar el derecho a que se expresen o saquen su música pero eso ya es un factor intrínseco que no creo tener que poner en caso de que me contesten. Realmente que más allá de nuevas bandas, espero nuevos puntos de vista con respecto a lo que tu mencionas del «chovinismo». Te felicito por haberte tomado el tiempo de criticar este álbum y te recomiendo que escuches algo que sí vale la pena como «Licencia para ser libre» de Rawayana (Venezolanos también). Saludos!
Para mi, el chovinismo es una señal de salud muy clara. «¿Tercer mundo? Bueno, sí. ¿Qué carajo? Jódete.»
Muchas veces se confunde avanzar con copiar.
Leí hasta que escribiste «Tiene momentos buenos, pero en su mayoría no es nada notable»… después sentí repulsión hacía el post y simplemente deje de leer para escribirte este comentario y dar Fé viva tangible, de que hay por lo menos alguien que esta en completo desacuerdo con lo que has escrito en esta oración.
¿Repulsión? Jaja. Qué fuerte.
No te preocupes, hay bastante prueba de que hay gente en desacuerdo con lo que escribí.
Una vaina que me revienta muchísimo y que no entiendo por qué nadie señala es la forma de cantar del pana. No sé de canto, pero parece que intenta poner la voz más grave o por lo menos no le da más claridad. Suena como los primeros discos de Zapato, donde el cantante hacía el mismo show. En ese intento de querer y no poner se replica lo que pasa con las letras, que es el segundo gran fallo de este disco. Por el contrario, ser ensimismado con el mundito del este no debería dar vergüenza, es honestidad: ponerse en plan apologético por ser del este, como hacen ellos en este disco, es lo penoso.
Hay que organizarse para erradicar la mitificación estúpida que carcome a la cultura venezolana: cada vez que alguien dice «talento venezolano» una paraulata se come un perrito mucuchí.