Es clara la movida.
Quieren hacer pasar la protesta legítima como una acción subversiva y conspirativa tendiente a buscar una salida inconstitucional.
Ayer los medios del gobierno se mantuvieron activos para meterle miedo a la gente y al pueblo elector.
El hombre de la Hojilla denunció la activación de un plan de la MUD para derrocar al presidente, mientras Maduro durmió en la capilla ardiente bajo el resguardo de un presunto comando antigolpe.
Ya montaron su melodrama barato de telenovela, para victimizarse.
Hablan de destrucción y quema del país. Pero solo muestran imágenes de gente en la calle y tomas viejas de guarimbas.
Por tanto, no caigan en la trampa mediática del cuarto poder de la revolución.
Les interesa dividirnos con el cuento del complot y la violencia. Por consiguiente, hoy debemos dar una lección de civismo y paz en las respectivas marchas dirigidas a las diferentes sedes del CNE.
En caso contrario, le haremos el juego a los programadores de VTV. Muy pendientes de infiltrados y «tirapiedras» espontáneos.
El objetivo es abrir las cajas y revisarlas voto a voto.