Así, Nicolás, a secas, de verdad no me nace decirte señor, no sé, no me sale, me sale falso, y para no ser falso, te digo Nicolás. Y no te digo presidente, porque para mí, y para más de 7 millones de personas, no eres presidente, hasta que se cuente los votos. Y también si te digo presidente me sale falso.
Nicolás, los más de 7 millones que votamos por Capriles, no somos ni oligarcas, ni pitiyanquis, ni lacayos del imperio, ni fascistas, ni agentes de la CIA. Somos ciudadanos que creemos que es necesario un cambio de rumbo a este país que queremos tanto.
Nicolás, estás perdiendo, no las elecciones que quizá ganaste y que más de 7 millones ponemos en duda. Estás perdiendo fuerza, estás perdiendo credibilidad, te estás hundiendo Nicolás, date cuenta, y eres tú mismo que lo está haciendo, no es el imperialismo, ni la CIA, eres tú que cada vez te estás quedando más solo. Tus metidas de pata, tu voz engolada de locutor de pueblo o de galán de telenovela barata, tus contradicciones, dices una cosa y al rato dices otra, nadie te puede tomar en serio, Nicolás, de ese modo, no.
No tienes, ni de lejos, el liderazgo, ni el carisma, ni la fuerza, ni el arrastre de Hugo Chávez (QEPD), eres gris, insípido, huevo sin sal. Serás buen marido, pero presidente…
Pero lo peor de todo, Nicolás, es que estás llevando al país a una de las peores crisis de la historia, el viernes negro y las crisis de los 90 serán juego de niños con lo que estás haciendo. Eres un bestia, no quería insultarte, pero ya mi estado de ánimo está alterado. El país está más polarizado que nunca, familias que se odian, amigos que no se pueden ver, mi madre me considera su enemigo, mi padre es persona non grata, gracias a ti, Nicolás, Chávez tiene su cuota de responsabilidad del odio entre nosostros mismos, pero tú lo elevaste a la décima potencia.
Nicolás, ¿qué quieres, que nos matemos entre todos, que hagamos una guerra civil, y luego culpar a Capriles y a Leopoldo López de la guerra civil? ¿Eres tan idiota?
No sé qué vas a hacer, vas a gobernar con tan sólo la mitad del país, porque la otra mitad no te va a aceptar. Recuerda esto, Nicolás, un gobierno legítimo no es sólo el que tiene la mayoría, sino el que gobierna para toda una nación, no para sólo quienes votaron por ese gobierno.
Ah, y esperamos que dejes hacer el conteo de los votos, porque entonces la cosa se te va a poner mucho más difícil para ti, Nicolás.
Por cierto, por ahí dicen que serás Nicolás el breve.