panfletonegro

Leopoldo, White America criolla.

1499623_760263593985041_1858848362_n

Tal como ocurrió en 2007, un político aprovechó la ola de los manifestantes para su propio ego, y armó un espectáculo al que no le falta ningún ingrediente del mejor drama yankee, tal como se puede apreciar en la foto. El gran ego de Leopoldo hizo que todos los muertos y heridos sean utilizados para hacer politiquería, dejando los cuerpos caídos a la nada.

Mis amigos opositores y seguidores de estas acciones han caído rápidamente en la espiral de la pasión, definiendo al nuevo líder opositor como héroe, justificando, los menos fanáticos, con que el movimiento necesita un rostro. En este sentido, ¿por qué no usar los rostros de Robert o de Bassil? ¿Por qué se necesita un político que tiene un claro lineamiento político en vez de crear un movimiento que incluya? Es muy fácil convocar a los estudiantes, cual soldados, dejarlos tragar bombas lacrimógenas y después, con las pasiones alborotadas, aparecer heróicamente y hacer la escena tipo Pearl Harbor con tu esposa.

Seguimos cayendo en los mismos errores. Desde el principio Leopoldo ha querido estar preso, como podemos ver en su Twitter, y no hace falta ser un genio en estrategia para saber que esta movida sólo lo beneficiará ante la opinión pública pues lo convierte inmediatamente en mártir, tal como hizo Chávez con los tantos atropellos a Capriles.

Me molestan mucho los comentarios de tantos manifestantes que excluyen a la otra Venezuela, a aquella que no piensa como ellos o la que critica los errores. Me molesta la pretensión de hacer bulla y bochinche en los medios internacionales, preocupados por lo que ponen en la BBC y en El País más que hacer llamado interno al país. Me molesta la pretensión de que nuestros problemas son más importantes que los de otros. Por ponerles un ejemplo, ahora mismo en Ucrania y desde hace más tiempo, hay unas protestas muy graves, pero ellos en vez de llenar el Twitter con #PrayForKiev, han decidido protestar en su idioma original e interiormente. Tal cosa ha ocurrido en Turquía y en los países Árabes. Esa pretensión internacional, es la misma que tenemos en el interior.

En las imágenes sólo veo una porción del país, tal como los retrataron en La Iguana (seguramente con conveniencia chavista), usando el inglés como segundo idioma, saliendo de plazas donde vive la clase media y ahora seguidores de un tipo que fue a Harvard y desciende de los Bolívar, una familia noble y racista. En las imágenes, por muy terribles que sea la violencia de los escuadrones de justicia gubernamentales, sólo veo una parte pequeña del país queriendo imponerse a otra sin respetar los votos, veo mucha forma pero poco contenido.

Creo en la tercera vía, donde entremos todos, donde El Sistema de Abreu no sea condenado, donde también las clases populares tengan acceso a las opiniones y sean respetadas, creo en el diálogo entre el estudiante de la Caracas del Este y el de Petare. Pero sobre todo creo que esa tercera vía tiene que aparecer de un movimiento popular que incluya a todas las clases sociales sin resentimientos pero con muchas ganas de trabajar juntos.

Si las intenciones de Leopoldo son el cambio, ¿por qué tiene que utilizar estas tácticas pop? ¿Por qué tiene que entregarse en medio de una plaza junto a los estudiantes, provocando que la multitud se altere e impida el paso de la GN? ¿Por qué no ir solo, sin manchar a los estudiantes que no están protestando por él sino por el país? ¿Por qué no se puede despedir de su esposa en la casa en vez de hacerlo así, en frente de todas las cámaras?

Es importante ser críticos con la información que nos intentan dar. Sobre todo en un país tan emotivo como el nuestro. Es importante no poner nuestra fe y nuestro amor en un político, por muy bueno que creamos que sea. Miremos nuestro pasado y nuestro presente, el aparato mega comunicacional que ha montado el chavismo gracias a la manipulación de la imagen y a la conexión pasional con sus seguidores. Miremos quién realmente es Leopoldo, de dónde viene, cuál es su propuesta además de un golpe de estado (que ayudó a dar en 2002) y qué ha hecho realmente además de tuitearle a Maduro que lo meta preso. Los políticos vienen y se van, las ideas quedan. ¿Dónde están las nuestras?

Ahora el hashtag es #TodosSomosLeopoldo en vez de #TodosSomosRobert o #TodosSomosBassil Bien fina la sociedad del espectáculo.

Giulio Vita

@elreytuqueque

Salir de la versión móvil