Chávez y su apoyo a la mujer
Las mujeres han tenido que librar grandes batallas históricas para lograr un espacio en la sociedad que les fue negado por siempre. En el pasado quedaron arrasados millones de seres humanos de sexo femenino, quienes por el sólo hecho de serlo, fueron y siguen aún siéndolo, sometidos a los más terribles excesos.
Chávez, estratega militar, le habló a las mujeres y las hizo sentir parte de su proceso, aunque dentro de su casa se le acusaba de las torturas más degradantes físicas y psicológicas por parte de su esposa, que a decir de Gabriela Ramírez, la Defensora de Pueblo, no eran tales, porque no buscaban una confesión.
Por lo general los autoritarios y de eso pareciera no haber dudas que el señor lo era, no creen en el género a la hora de imponer sus deseos. Pero era un especialista en las apariencias y por eso habló que su gobierno incluiría a las mujeres, pero más aún, teniendo el poder absoluto, lo llevó más allá y fueron escogidas algunas para ser cabeza de los Poderes Públicos del Estado.
De forma era un maravilla, porque la inclusión es siempre un buen signo para toda sociedad, pero el fraude, como tantos otros que realizó, no tardó en materializarse y lo ha sufrido con creces todo la sociedad venezolana, en momentos cuando más se necesita la sensibilidad para al menos, hacer llamados a la cordura por el respeto a los derechos de todas las personas, sin importar su forma de pensar, como debería ser la norma.
Aquello del poeta Andrés Eloy: quien tiene un hijo tiene todos los hijos del mundo, toma gran relevancia al venir de un hombre. En el caso de la mujer pareciera no ser necesario decirlo porque ella per se, lo siente en toda su esencia como ser humano. Pero las mujeres que Chávez llevó a encargarse de los Poderes del Estado no.
En la Dirección de estos colocó a los seres más despiadados e insensibles, con ropaje y forma de mujeres, pero capaces de mostrar la mayor indolencia ante los atropellos que se viven en el país, no por los sucesos de ahora, con las torturas y tratos crueles e inhumanos por parte del gobierno, sino por lo que ha venido ocurriendo desde hace mucho tiempo, con el total deterioro de los valores como sociedad, que ellas han abalado con sus posiciones de respaldo a un gobierno profundamente inmoral.
Chávez escogió bien, sabía mucho de números, de impactos en los medios y estadísticas relevantes y dio espacio a la diversidad de género colocando, por su abusivo uso del poder, en la cabeza de los Poderes del Estado a mujeres. Eso podría ser usado de forma positiva interna y externamente en los reportes que realizan las Organizaciones Internacionales al respecto.
El problema fue que no eran las mejores académicamente y peor aún, tampoco moralmente, estando dispuestas a asentir ante todos los desmanes que se cometen, renegando la condición de mujer y siendo una vergüenza para su género. Sólo tienen formas femeninas, pero en esencia son monstruos, sin sentimientos, valores y respeto. Nada de inclusión movió al “Comandante”, sólo otra de las publicidades de su régimen, como todo lo que está detrás de su “gran legado” orwelliano.
Manuel Gentilicio
manuel.gentilicio@yahoo.comChávez y el apoyo a la mujer