Para empezar, haré una revisión de la Historia de la Unión Soviética, más específicamente de la ideología de Lenin.
El mismo padre ideológico del Socialismo Soviético, luego que hubo trinufado la Revolución Soviética Bolchevique (Bolchevique se traduce como ‘miembro de la mayoría’ o mayoría’. Se autodenominaban así a pesar que en los inicios, esta facción de los socialistas eran una minoría respecto a las otras tendencias socialistas), Lenin aclaró, por una parte que el proceso de transformación de la sociedad está dada por varios pasos que dirigen al Comunismo (la meta final del Socialismo): Primero, la etapa revolucionaria: en la que debe (así mismo dice, DEBE), si es necesario, usarse la violencia para hacerse con el Poder (‘Esta dictadura [del proletariado] supone el empleo de la violencia, implacablemente severa, rápida y decidida, para aplastrar la resistencia de los explotadores, de los capitalistas, de los terratenientes y de sus secuaces. Quién no lo haya comprendido no es un revolucionario y hay que apartarlo de la dirección o del puesto de consejero del proletariado’ en ‘Un saludo a los Obreros Húngaros’, tomo 3, p214 Obas escogidas de Lenin, Edit. Progreso, Moscú, 1963. Como si la incomprensión fuera un pecado! Esto demustra los principios violentos de los ‘revolucionarios’). Luego viene la etapa de la estabilización político-social del país (donde pueden usarse sin problemas las fuerzas represoras del Estado). Al ver que no estaban funcionando las políticas económicas que se ‘propusieron’ inicialmente (expropiación y expulsión de capitalistas para pasar el control a los proletarios y destrucción de la banca privada), el propio Lenin propuso una NUEVA POLÍTICA ECONÓMICA donde establecía la NECESIDAD de llegar a acuerdos con los empresarios privados y trabajar junto a ellos para lograr la estabilización de la economía nacional, y luego que obtuvieran lo que querían y necesitaba el Gobierno, pues podrían nuevamente expropiarlos y expulsarlos del país por capitalistas.
En la Venezuela de hoy estamos pasando una situación similar. No puedo decir si es producto de la casualidad o de los dirigentes del Gobierno hayan estudiado efectivamente estas ideas. Aparentemente pareciera que es así. O no digamos que las hayan estudiado, sino que más bien que hayan sido adoctrinados en tales, ya que se limitan a repetir frases que parecieran tener cierta coherencia para ellos. O sencillamente por causa de la ignorancia, la apatía y el pasotismo general que hay en este país respecto a estos temas. Sin embargo pareciera que nos dirigimos indefectiblemente a esa dirección al pretender los empresarios privados (que quedan) aceptar la propuesta y dialogar con el Gobierno. Me parece conveniente recordar el caso de Capriles, quién en su oportunidad (que la tuvo, aunque en otro contexto) legitimó unos resultados electorales (que a muchos les olió a algo y no era precisamente a rosas), al aceptar los resultados y posteriormente pretender que sigamos las condiciones del juego esperando al 2019 para la otra ronda. Gracias a eso cayó de lo más alto, perdió una oportunidad dorada, traicionando la confianza de sus seguidores, por lo que ya no representa lo que vendía.
En el caso de los industriales, está pasando algo similar: aunque ellos no negocian consciencias (o por lo menos creamos, aunque sea un momento, en ello) sino mercancías de primera necesidad como alimentos, medicinas, ropa (en ese orden), pueden caer en un juego donde el Gobierno los respalde y los ‘deje quietos’, pero no será de gratis, por ‘amor’ al pueblo, por la ‘paz’ de la sociedad, sino por intereses (del gobierno) de que ya hemos visto y escuchado en declaraciones oficiales (porque descaradamente lo admiten) y los ocultos a plena vista, que, si utilizamos el ojo de la razón, podremos verlos con toda claridad.
Es un tanto ingenuo creer que buscar una alianza de ‘Paz’ (otro concepto nebuloso) económica y social con un gobierno que manda a expropiar y luego pide concenso, que tira bombas, ‘apaga candelitas’, mete presos a estudiantes ‘guarimberos’ y luego los llame a que se reúnan en una convención de Paz, vaya a cambiar las cosas.
Una muy querida amiga hizo que viera otra variable en todo esto y es que pueden existir intereses ocultos (cosa que personalmente creo que los hay) en todo esto (al igual que en el ‘caso Capriles’). En ese caso esta reflexión sirva para dejar al descubierto las verdaderas intenciones de los emrpesarios… Por un lado, (como expone mi amiga), están los intereses empresariales, entre los que se cuenta el lucro y ganancia (el que sea explotando al individuo o trabajando CON él, es otra cosa). Por otro lado, pueden estar haciendolo porque creen realmente que con ello ayudarán a estabilizar la crisis, mejorar la calidad y cantidad de su producción para que el ‘pueblo’ no pase hambre. Ciertamente en todo esto hay muchos intereses descubiertos y ocultos (lo mismo que decir que por qué Estados Unidos y otros países no se han metido de lleno en todo este peo o Rusia y China que quieren instalar bases en el país, como pasó en Cuba en el 62, por poner un ejemplo).
Según mi perspectiva, dialogar con el Gobierno es caer en su juego, es legitimar las acciones pasadas y deslegitimar las protestas y la desobediencia civil que se ha generalizado a lo largo de las últimas semanas. ¿Quién garantiza que no volverá a emplear esos métodos? Ya se ha demostrado en diversas ocasiones que este es un gobierno traidor a su palabra (con la oposición y con sus seguidores, aunque muchos de ellos no quieran o puedan darse cuenta de ello). Como dice M. Descartes: quien te engaña una vez, puede volver a engañarte ¿quién garantiza que este caso no es igual? Y no hay peor pecado,según Dante Alighieri, que la traición… Es una perspectiva que me preocupa mucho (demasiado tal vez, y todo en demasía es dañino).
Entonces ¿qué hacer? No caer en la tentación sería un buen comienzo, y continuar el camino que hemos elegido muchos es el siguiente paso. También si ellos (los empresarios) eligieron el camino de la conciliación (por las razones que sean), deben tener en cuenta que también sus consecuencias afectarán a toda la población venezolana, porque, lamentablemente, el bienestar de la mayoría de la gente aún depende de la de la decisiones de unos pocos.
Si nos descuidamos, cometeremos los mismos que se cometieron en otras épocas; la diferencia está en que hoy disponemos de la Historia que nos enseña una lección, solo hay que leerla.
S@lud!
comienzas con un error terrible, bolchevique significa lo contrario, las minorias eran llamadas «mencheviques»
Estimado. Confieso que no leí todo su articulo, me bastaron las primeras 3 lineas para descubrir que usted no sabe nada de historia.
Los Bolcheviques no eran la minoría del partido socialdemocrático ruso. Era la mayoría de quienes al interno deciden apoyar las tesis de Lenin en el congreso de Londres de 1903. En cualquier diccionario podrá encontrar esta información. La minoría era conformada por los Mencheviques que contrariamente a Lenin no estaban de acuerdo con recurrir a la revolución, es decir las vías violentas.
Sin embargo si no está del todo convencido si observa la raiz de esa palabra deriva de Bolshoi que en ruso se traduce como en «Grande».
Con esto no quiere decir que este defendiendo Lenin, pero conocer la historia es importante para poder elaborar críticas inteligentes.
Agradezco las críticas realizadas. Editaré la información para que sea correcta respecto a la exactitud histórica. Efectivamente hay un craso error en cuanto a la etimología de la palabra Bolchevique y lo reconozco. En cuanto a que eran la minoría, pues hago referencia a las votaciones que tuvieron lugar en 1917 para definir a los miembros de la asamblea constituyente rusa, donde obtuvieron apenas el 24% de los votos, y debido a este resultado, en breve, los Bolcheviques disolvieron en breve dicha Asamblea y se invalidó el resultado de las votaciones. Aclaro que es la primera vez que escribo sobre el tema (y no digo como justificación ni excusa) y siempre serán bienvenidas las críticas, con tal que no haya agresividad ni violencia en las mismas. Agradezco sus aportes. Uno se dá cuenta de sus errores solo en franco diálogo con el otro. Señor Dante, le sugiero que lo lea completo, aunque no le guste o no esté de acuerdo con lo que expongo, ya que pareciera creer que el artículo es meramente de carácter histórico, y no es así. Muchas veces deberíamos leer la cosas completas aunque no sean de nuestro agrado para poder entender qué es lo que pasa por la mente de los demás. A mí personalmente no me agrada para nada la ideología de Lenin, sin embargo me siento en la obligación intelectual de leer lo que me gusta y lo que no para intentar comprender y la situación. S@lud!
Estimado,
He leido su artículo.
Aprecio que haya corregido el error. Es cierto que obtuvieron el 25% de los votos en la Asamblea Constituyente pero debe observar el mapa completo de la distribución de los votos. 50% Socialistas revolucionarios (que a diferencia de los socialistas marxistas sostenían que los campesinos no los obreros deberían ir al poder, Rusia era un país Agrario, profundamente retrogrado y desde el 1861, año de la abolición de la servidumbre, no se encontraba solución al problema de la redistribución de las tierras), 10% Liberales, 5% Mencheviques y el resto demas partidos de izquierda.
Aprecio su interes en la historia, pero le debo recordar que es erroneo querer hacer comparaciones entre Venezuela y la URSS y sacar conclusiones históricas. Las primeras medidas económicas de Lenin responden a la necesidad de monopolizar el poder durante la guerra civil o guerra patriótica rusa. Era un estado de emergencia.
Los preceptos del marxismo, banalizandolos, nos dicen que es necesaria la industrialización de un pais para poder llegar a la nueva fase de la historia, el Socialismo que a su vez es el paso final al comunismo.
En la Venezuela bolivariana ciertamente podemos encontrar analogías interesantes pero sin embargo lejanas. El Socialismo del siglo XXI de Chávez es un calderón de ideologías asimiladas muy forzosamente.
Recuerde la ideología es perfecta solo en le mundo de las ideas.
Lo que se vive en Venezuela es algo mas similar al periodo Gomecista que a otra cosa, en mi opinión. Clientelismo petrolifero, irrespeto por las normas costitucionales, abuso de poder, abuso de posición, distintas empresas de maletín, dependencia exclusiva del petroleo, abandono de las empresas agrarias, mutamento continuo de las normas fiscales y cambiarias, y para usted de contar.
Concentremonos en nuestra historia.
Saludos
Viejo… créeme, Maduro no es Lenin. Te fuiste pero de laaaargo con las comparaciones.
El gobierno… el chavismo lo que busca es sobrevivir. Cualquier proyecto ideológico (si es que alguna vez existió) se fue a la otra dimensión con el comandante intergaláctico.
@Dante: Estimado Dante. Lo que trato es hacer un paralelismo ya que veo que estamos repitiendo la historia (en nuestro contexto) Precisamente lo que quiere este gobierno actual es terminar de hacerse con el Poder total (que no ha podido tenerlo del todo debido a que hay mayor difusión de ideas por las nuevas tecnologías) y nuestra población viene de una tradición muy diferente (para bien o para mal) que no le ha permitido lograr sus objetivos (junto con el hecho que es un gobierno bastante incompetente)
Por otro lado, cierto es que se manejan otro tipo de intereses como los que menciona y eso es lo que hace que el contexto sea diferente. Ese clientelismo que usted menciona es el mismo que se manja con países capitalistas, solo que el gobierno enfocarlo hacia países pseudo-socialistas como China.
Y finalmente, como lo indica, el pseudo-socialismo que pretenden instaurar acá es un mezclote de ideas interesantes pero en las que no han profundizado mucho. Incluso me atrevo a decir que por lo menos los Soviéticos (con Lenin a la cabeza) cuando llegaron al poder, tenían una ideología que habían venido desarrollando y adaptando a la realidad rusa del momento (había un trabajo intelectual profundo antes, erróneo o no). Este ‘movimiento socialista venezolano’ no tiene algo que se le parezca: en eso son como los cubanos: Según las memorias de Khruschev, indica que cuando conoció a Fidel, este no tenía claro qué era el socialismo y no tenía claros sus objetivos.Solo se hizo socialista ofcialmente cuando los soviéticos le propusieron una alianza (por conveniencia). Mi interés en plantear estas ideas es abrir los ojos a quién aún se hace llamar ‘chavista’ para motivarlos a investigar un poco más al respecto, y si tienen algo de consciencia, no cometer los mismos errores que llevaron a 70 años de miseria social… Nosotros llevamos 15. S@lud
@A.J.C.: Estimado A.J.C Una de las ideas del artículo es mostrar que efectivamente no hay un ‘proyecto socialista’ formal en este gobierno, solo le van dando forma de acuerdo a las necesidades. Y por supuesto, no hay ninguna ideología de base para aplicarlo a la actualidad venezolana. Quizás la única ideología de base es la castro-comunista de los 50-60, pero aquella era otra época y otras circuntancias-país (Cuba) muy diferente a nuestra realidad actual. S@lud!
No es recomendable hacer paralelismos históricos a la ligera…las comparaciones se hacen para individuar diferencias a partir de una misma raíz y merecen un estudio que requiere años. La historia no se repite nunca, o por lo menos nunca lo hace de la misma manera..los eventos históricos son todos únicos y complejos a su modo existen incluso corrientes que sostienen, con amplia documentación, cómo esta sea producto de casualidades y contingencias precisas e irrepetibles. Aprecio su interes en la historia de la URSS y de la China Comunista. Pero debemos siempre contextualizar, es cierto que podemos encontrar similitudes pero son efímeras y a lo sumo ligadas a la psicología del hombre, cómo decía Tucidides: Miedo, Honor e Interes componen al hombre y esto hace que la historia nos parezca cíclica. Krushev hace esas declaraciones sobre Castro después de la crisis de los misiles, Castro quería que fuesen utilizados!…si vamos al punto Kruschev no era la persona mas ilustrada del planeta y fue obligado a dimitir a causa de su «política aventurera». La Unión Soviética conoció muchos sacrificios, dolorosos, cruentos y oscuros pero tampoco fue ese infierno que nos han descrito muchos libros de historia, recuerde que fue el país que derrocó a Hitler, y hasta el 79 fue una formidable potencia mundial (se lo digo porque he dedicado la mayor parte de mis estudios a la URSS). Gómez, repito, es mas acertado cómo cuadro histórico para comparar nuestra horrorosa experiencia actual, las características son mas cónsonas y más cercanas. Pero en ningún momento estamos repitiendo la historia…estudiarla sirve para entender porqué estamos donde estamos, comprender nuestras herencias históricas. La URSS, el socialismo de Marx, la China Maoista (que era rival mortal de la URSS desde el 50), la Alemania Nazi, el Fascismo Italiano son espectaculares para estudiar y enriquecernos culturalmente pero debemos cuidarnos de buscar seguridad o predicciones en ellos fuera del ambiente donde nacieron y se evolucionaron. Chávez era un caudillo cómo tantos otros de la historia latinoamericana es decir un don nadie más allá de nuestras fronteras continentales, un mero personaje folklórico, Maduro es una mala copia y ciertamente nos está llevando a la ruina pero nada tienen que ver los fundamentos ideológicos del socialismo sovietico aplicados a la Venezuela del siglo XXI.Saludos! Espero leer un próximo artículo suyo.