Hoy nos hemos estremecido con la estridente noticia del SICAD 2, todos están perplejos, aterrorizados y hasta impresionados de algo que sabíamos que tarde ó temprano pasaría, una nueva devaluación.
Pero como somos una sociedad absolutamente delirante, neurótica y empeñada en victimizarse, nos tomamos dicho anuncio, como una ofensa, represalia y hasta falta de respeto, esté último, pudiese sopesarlo, porque si es una falta de respeto, ya que el gobierno ha sido profundamente irresponsable con el dinero de la nación, que en teoría debería manejar como un “buen padre de familia”, siguiendo la máxima del derecho, donde el mandatario tiene tal obligación.
Lo cierto del caso es que, buena parte de la población ó por lo menos aquella que ha sido sometida desde hace 30 años a cursos intensivos de economía, , deseándolo ó no, cuando vive nuevamente una crisis más – de las tantas que hemos padecido-, es capaz de ver venir las magnitudes, es más hasta lo comenta a cada hora y cada rato, por eso intenta hacer unos incipientes ejercicios de ahorro y control propio de sus financias, previendo la super – dramática bomba que se avecina (como tantas otras) y entonces después arma un escándalo cual “Laura en América”, de que le están violando sus derechos constitucionales.
Y me pregunto yo, que horror y que escándalo, hay algo nuevo bajo el sol? Con este comentario sarcástico no quiero disminuir la gravedad del asunto, pero porque siempre tenemos que armar un show ó argumentar como sorprendidos, algo que era un secreto a voces, como casi todos los hechos que hoy en día vivimos.
Esa capacidad de hacernos los sorprendidos, de darnos por recientemente aludidos, como dirían algunos por allí, de quedarnos como Condorito, creo q lo que genera es más daño y neurosis colectiva, que beneficios y soluciones.
En Enero, después de pasar todo diciembre especulando -que es la ciencia que más nos divierte y fortalece- que habría una devaluación, que eliminarían CADIVI (cosa que venimos esperando desde hace unos 5 años), incluso que hasta el dólar pasaría a ser la moneda oficial, etc. Cuando el fatídico hecho ocurrió, fue como presenciar una tragedia griega, sólo que en versión 2.0.
El Facebook se lleno de mensajes tristes, acongojados, sorprendidos, todos hipócritas, sin más, porque todos ellos, sabían que esa decisión llegaría y que eso estaba por pasar, así que no se vengan con cuentos ó con delirios de ética y moral ciudadana, cuando muchos fueron a Daka a comprar, porque había que invertir “los reales” antes de que viniese el bombazo, allí si es bueno saber de economía, pero para vivir en el mundo real, no.
Sí se quiere cambiar de sistema, régimen ó por lo menos de políticos, va siendo hora de que los problemas reales, se asuman con soluciones reales y no con meras declaraciones de principios que ni llenan, ni convencen.
Ó diga la MUD, Capriles, Leopoldo, María Corina y hasta María Bolívar que habrían hecho, si estuviesen en la misma situación? Sí alguno de ustedes tuviese el dolor de cabeza de dirigir este país ó lo que queda de él, si es que queda algo, no hubiesen hecho lo mismo ó hasta más profundo e intenso?
Cuando leo, Econometrica, Datanalisis, escucho a Pedro Palma, José Guerra y otros, que es lo que planteaban cómo medidas económicas? Cuales deberían ser los primeros pasos, para intentar “normalizar” la economía?
Entonces una vez más, no me revienten las pelotas, los políticos de oposición, con un teatro a lo Sara Bernhart, que esto que está haciendo el gobierno es una atrocidad, un abuso, etc, etc. Hagan su trabajo serio de oposición que es exigirle al gobierno, qué aún cuando se vea en la imperiosa necesidad de tomar esas medidas, las cuales ellos mismo originaron, cómo van a mejorar la productividad? Cómo van a solucionar la escasez, que ahora con mayor razón, se va a convertir en un problema? Cual es el plan de empleos ó de expansión de opciones laborales?
Y el gobierno, donde se va a meter el discurso de izquierda – socialista – salvador de mundo? Hasta donde los he leído, escuchado y visto, semejantes medidas como las de hoy, obedecen a un patrón capitalista, neoliberal, vende patria. Entonces, ustedes que son?
Ya basta de la política del “Big Brother”, showsera y mediocre, donde cuando uno dice, el otro sale a replicar y decir que no fue ó que eso no es así; de sacarse los trapitos al sol, como si las instituciones y los funcionarios públicos, protagonisasen la más burda de las novelas mexicanas ó venezolanas.
Para hacer política de altura, no hace falta ser tragicómico, hace falta voluntad y responsabilidad y eso como que hoy en día muy pocos saben lo que es.