1) Siempre le hincha al equipo pequeño o del «tercer mundo».
2) Aprovecha cualquier pretexto para satanizar a la FIFA(considerada un organismo mafioso por ellos, a pesar de aceptar sus reglas e incrementar los índices de audiencia de sus campeonatos).
3) Automáticamente condena los penales pitados a favor de las selecciones europeas.
4) Lee los análisis futboleros de Galeano con una devoción inquebrantable.
5) Escucha las intervenciones de Maradona en «De Zurda» como si fuesen verdades absolutas.
6) Habla de los pobres y humildes jugadores de Sudamérica. Cosa cierta hasta un punto: hoy son ricos y le hincan los dientes a la economía del mercado publicitario.
7) Todo lo interpretan de forma maniquea. Como dice Francisco Toro, el Mundial es un amplificador de sus complejos, prejuicios y esquemas binarios.
8) Defiende a la bandera propia, aunque sea por el motivo equivocado(Súarez, por ejemplo).
9) Viste a la moda del fashoneo sandalista, bohemio, hippie, izquierdoso. Pero se siente al margen del influjo de los trapos y su gente. En cualquier caso, hay producción en su look.
10) Según su punto de vista, todos los árbitos están comprados.
11) Sueña con la final de Brasil(o Colombia) y Argentina. Anhela la derrota de Holanda y Alemania.
12) Se las echa de conocedor de la materia. Suele ser un pedante intelectual.
13) No admite críticas a la organización del gobierno de Dilma(compañera de batalla). Por tanto, asume la copa como una terapia de enfríamiento de la calle caliente.
14) Irónicamente, sigue un evento plenamente acoplado a los dogmas del capitalismo liberal: el darwinismo social, la ley del más apto, la explotación comercial, el mesianismo, la competencia feroz, la consagración individual, la lucha por un trofeo(antesala del reparto de un botín de millones).
En consecuencia, la izquierda deberían hacer su mundial alternativo con partidos sin goles, sin árbitros, sin patrocinantes, sin pausas para hidratarse con Powerade durante cinco minutos, sin las poses de Cristiano para las cámaras, sin vedettes, sin potencias coloniales, sin plata.
Una suerte de Foro Social para darse palmaditas en la espalda.
Algo que sería muy aburrido de ver.