PRODAVINCI publicó recientemente una traducción de un texto indignado de Jon Lee Anderson, originalmente escrito para The New Yorker, sobre la decapitación de James Foley. Me permito citar un párrafo del mencionado artículo: «Tristemente, si alguna vez fue difícil concebir personas capaces de tan insondable crueldad, ya no es así. Las guerrillas de ayer han dado paso a los terroristas, y ahora los terroristas dan paso a esta nueva banda, que son algo así como asesinos en serie. ISIS, una organización de vándalos, es la respuesta del Medio Oriente a la banda psico-asesina de narcotraficantes Los Zetas, tratando de superar en maldad a sus enemigos, de intimidarlos hasta hacerlos sumisos y, de alguna forma, dibujarse a sí mismos como una caricatura del mal». El artículo concluye con una cita en la que los miembros de ISIS son descritos como «los nuevos bárbaros».
Las acciones de ISIS son de una barbarie indiscutible. Puedo aceptar sin problema alguno que los mercenarios que conforman tal organización terrorista sean calificados como ‘bárbaros’. Sin embargo, me resulta problemática la manera en la que el juicio está enmarcado por la presunta ‘novedad’ de la barbarie de ISIS, ignorando olímpicamente otras ‘ejecuciones’ y asesinatos, como si no fueran actos de barbarie comparable. Como si los deplorables actos cometidos por ISIS sólo fueran comparables con los de las guerrillas o Los Zetas. ¿Acaso es menos bárbaro un asesinato cuando se emplean drones, misiles y tanques? ¿Por qué? ¿Porque no hay videos casi pornográficos de cuerpos humanos destrozados por una explosión?
Armadillo, un documental que sigue las acciones de un grupo de soldados daneses en Afganistán, incluye una escena en la que uno de ellos describe la eliminación de un grupo de presuntos talibanes. El soldado danés cuenta sin vergüenza alguna «y entonces los liquidamos lo más humanamente posible».
¿Existe eso? ¿Una manera ‘humana’ de ‘liquidar’ a una persona? ¿O es que un horrible asesinato se convierte en ‘barbarie’ sólo cuando es cometido por ‘otros’?
