Una cosa que no he terminado de entender es cómo la gente sigue creyéndole a los políticos que dicen que estarán un número limitado de años en el poder, que renunciarán si no logran los objetivos de su campaña.
Ponte en su lugar: imagínate que has luchado toda tu vida por montar una empresa y ser relativamente exitoso. Lo has sacrificado todo: tu tranquilidad, tu familia, tus amigos, un ingreso estable. Llega el día en el que parece que lo lograste, puedes vivir de eso y cumplir algunos de tus sueños ¿Por qué querrías renunciar?
Ahora imagina que no es una empresa sino que es una alcaldía, un curul en el congreso, la presidencia. Además de tener todas tus necesidades cubiertas, tienes poder. ¿Renunciarías? Esta es la historia que te cuentan los populistas.
Huye de los políticos que prometen que sólo estarán 4, 5 o 6 años en el poder. No sólo te mienten, sino que te ven la cara de imbécil.
Yo diría que hay un mito peor que ese, total, hay políticos que pudiendo gobernar más, no lo hicieron, como Betancourt. Es increíble ver que aún hoy funciona toda la palabrería de «yo no busco el poder, yo busco es servir a la gente», como si de sacerdotes se tratara.
Sinceramente, confiaría mucho más en un político que diga «Yo busco el poder y a cambio les daré X e Y» a esos políticos con posturas seudo-cristianas para el momento de la verdad solo pelear por sus propios intereses.
Tomado de los comentarios de otro artículo en esta misma página:
«El sistema político Español necesita una sacudida y Podemos puede ser quien la de, ahora bien, si en cuatro años no han cumplido su progama electoral o empiezan a haber indicios de Caciquismo en su mandato, fuera del poder y punto (al respecto, creo que el mismo Pablo Iglesias ha dicho que él no va a estar más de 4 años al frente del partido incluso si siguen ganando elecciones). La clave está en que el pueblo no se deje engañar por falsos mesías y mantenga la actitud crítica, que, ahora mismo, SI hay (entre otras cosas gracias a partidos nuevos como Podemos) en España».
#DancingMeThatTrompingOnYourFingernail
Lo malo es que se esté naturalizando la idea de perpetuación en el poder. El escrito sugiere como «natural» y legítimo que un político/a se perpetúe en el poder porque ha invertido todo para llegar, lo cual la da derechos a conservar y usufructuar el poder per omnia sécula seculorum… El escriba, y este medio, hacen «apología del delito» republicano del principio de que la democracia se legitima en la alternancia. Es peligroso dar vuelo a este tipo de deformaciones de la información-formación pretendiendo que lo habitual o asimilable al «sentido común» atente contra elementales principios de la convivencia democrática. ¡Cuidado!.