Son muchos los que han engañado, pisoteado; la pobre y escasa comprensión del mas débil. Otros se han silenciado ante la bonanza voluntariamente observando la caida de un estado que es controlado con la asesoría Cubana. Todas las vertientes de esta dictadura ya están instaurada en Venezuela y el ciudadano común no necesita pruebas para comprobar el grado de descomposición del país. Todos tenemos un familiar o un vecino que ha sido robado secuestrado o hasta asesinado. Todos hemos visto en nuestros barrios, urbanizaciones, a los celebres motorizados que amparados por el régimen y su nombre de colectivo, intimada, controla y asesina dándole protección.
Desde hace muchos años se ha estado conformando un estado delincuencial y los integrantes de la oposición ya eran conscientes de lo que se avecinaba. No había que ser un estadista para entender las acciones que emprendian nos conducirían a la catástrofe en la que hoy vive el pais. Junto a los culpables que ya conocemos hay una responsabilidad notable en los que no tomaron acciones en su debido momento. Personajes que hicieron de oposición. Militares que vendieron su responsabilidad para integrarse a la maquinaria de la mafia al grado de ceder nuestra soberanía a Cuba.
Hoy continuamos asistiendo a primarias, a elecciones con la desventaja mas aberrante. En medio de la intimidación y aun así nuestras quejas siguen siendo intranscendentes. No soy partidario de la abstención pero si de que las votaciones sean un medio para declarar el fraude una vez concluidas y activar por medio de ellas las movilizaciones pero lamentablemente tenemos muchos ejemplos de cobardía y entreguismos que nos hace perder la fe. De hombres que utilizaron su liderazgo para engañar al pueblo y después jactarse diciendo que su inmovilidad no es a consecuencia del miedo sino de su espíritu pacifico y democrático. Tales palabras solo pueden darnos una idea de la complicidad de estos personajes. En estos regímenes no hay salida sin una crisis a gran escala o sin una sublevación militar y civil.
Hoy nuestras palabras no pueden quedar a medias tintas, debemos conspirar. La racionalidad no tienen cabida ni apegos a las constituciones que instauran y violan tiranos. La inteligencia debe de ser un factor preponderante junto al ingenio para salirnos del contexto donde nos hicieron entrar ciertos factores de la oposición y el régimen. Hay que tener inventiva, hay que trabajar incansablemente sin mostrar nuestras armas. El régimen ya se prepara para desmovilizar las acciones posteriores a las parlamentarias. Expondrán pruebas involucrando a candidatos, harán cadenas, movilizaran colectivos, regalaran dinero. Intimidaran al pueblo para que este no salga a votar. El libreto no es nuevo tampoco nuestra incapacidad.
El pilar fundamental de este régimen son los grupos armados. Hay que penetrar estos colectivos ubicar a sus lideres y ponerle nombre a cada uno de sus presidentes en todo el territorio nacional, así como a los que los secundan en mando. Tenemos que tener claro su identidad, sus imágenes, a los responsables de los asesinatos y represión que resguardan el negocio de muerte, droga y asesinato en Venezuela.
En los conflictos de este tipo los lideres son pocos, y allí a donde debemos dirigirnos. Todas las movilizaciones parten de unas cuantas hombres, resguardados por fusiles y armamento que son del pueblo. Hasta allí llega el nivel de bajeza y entrega de algunos militares que pasaran a la historia por su deslealtad. Es la hora de eliminar prejuicios. De utilizar el cinismo, la ironía y la teatralidad de los agresores. Donde quiera que estemos ejecutar acciones que vayan minando la solidez del cerco. Eliminar de nuestras mentes los valores humanos y la moralidad de las leyes ya que la constitución es violada constantemente y solo se utiliza cuando corre peligro el equilibrio del poder criminal. Y así como nuestros derechos fueron borrados los de nuestros agresores también deben serlo.
En épocas de conflictos nuestros victimarios no deben de disponer de garantías. Debemos tener la fortaleza para entender de que no se trata de un estado de derecho y que en la recuperación de un país se deben violentar ciertas normas para poder recuperarlas. Hay que entender que hemos sido ocupados por los tentáculos criminales provenientes de una organizacion delincuencial. Por la mano homicida de los Castro y por las complacencias de lideres opositores y cúpulas militares que han hipotecado nuestro país por el negocio ilícito de los estupefacientes, el petroleo, y el resguardo de sus negocios.
Es la hora de desarticular la pirámide zonificando y alineando en escalas cada componente que sea un pilar. Para empezar a derrumbar la estructura de poder, para sanear todos los estamentos corruptos que estan alineados con la dictadura castrista y el desfalco del país. Por el honor y el prestigio de nuestro país las acciones deben de ser totales y contundentes.