6:00 a.m.

Suena el despertador que me saca de mi sueño todas las mañanas, casi instantáneamente al escuchar su ruido me llega la sensación de que ya es otro día más. Cometo el error de pensar por 5 segundos que comienzo de cero, que todo lo que he vivido antes de ese momento se perdió durante la noche y que tengo la oportunidad de replantear mis objetivos sobre unas expectativas limpias y puras, sin embargo de inmediato también se despiertan mis recuerdos, invaden mi mente como un maremoto azotando la orilla de una playa, comienzan a surgir todas las preocupaciones, responsabilidades y problemas, exactamente los mismos que tenía ayer, de forma rápida hago un balance de todas las actividades que tengo que hacer y las energías que me quedan para poder efectuarlas. Cuando evidencio que mis energías no son las suficientes y que el balance arroja resultado negativo, inicio la etapa de justificación en donde comienzo a redactar escusas mentalmente para aquellos quienes dependen de mis responsabilidades… Transacción fallida, no hay escusas suficientes y el tiempo apremia.

Contemplo mi reflejo en el  espejo del baño mientras me pregunto cómo fue que llegue a ese lugar, recuerdo hace algunos años que tenía expectativas de hacer cosas diferentes, al compararlas con mis actividades actuales me doy cuenta que no se parecen en nada a lo que alguna vez imagine… Incertidumbre.

¿Cómo es que siempre imaginamos que tenemos control sobre nuestras vidas y cuando haces un resumen evidencias que nunca lo has tenido? Siempre has sido víctima de las circunstancias y la dinámica de tu vida te lleva a senderos que nunca pudiste imaginar.

¿Destino o casualidad?

¿Tenemos libre albedrío?

Nuevamente al espejo, intento moldear mi apariencia a una figura moderadamente aceptable al escrutinio social, pasar desapercibido ante los demás o al menos tener aceptación de los que se tropiecen conmigo, eventualmente mi apariencia no se  compara a los arquetipos perfeccionistas creados por la sociedad como los adecuados, pero el mínimo requisito es estar limpio y tener algo que cubra las partes de tu cuerpo que no puedes andar exhibiendo por las calles.

7:00 a.m.

Nutritivo desayuno rico en calorías y grasa saturada, sazonado con café y nicotina, excelente para comenzar las mañanas, recuerdo haber escuchado hablar sobre como la buena alimentación te garantiza una vida optima y feliz, para ello te tienes que cohibir de comer las cosas deliciosas y de hacer las cosas más divertidas, eso es lo que hace más daño. Si mi moneda de pago para disfrutar de las cosas más placenteras de este mundo es el tiempo que vivo en el ¿Qué preferiría, vivir poco o existir mucho?

8:00 a.m.

Comienza mi jornada laboral, el sistema es muy sencillo, aporto la mayor parte de mi tiempo y energías a la institución y ellos me pagan por eso. Como no encontraron un valor monetario razonable para poder pagar el tiempo y la energía de los seres humanos crearon una escala de sueldos estructurada según tus habilidades y conocimientos, eventualmente debes tener un papel que avale que aprendiste eso en algún lugar, si no tienes el comprobante ni siquiera lo intentes.

12:00 m.

Disfruto de un ameno paseo por la ciudad, aire lleno de monóxido de carbono, basura en la calle, perros callejeros, alguien intenta venderte algo con la apariencia totalmente desproporcional a lo que representa un ciudadano decente según la sociedad, gente caminando parecen saber a dónde van, estoy seguro de que la mayoría no tiene ni la menor idea, se ven tan encerrados dentro de sus propias cabezas, prisiones creadas por nuestras propias inhibiciones, no se percatan que el universo es tan infinitamente inmenso, ignoran por completo el proceso de millones y millones de años y de un conjunto de circunstancia perfectamente alineadas que fue necesario para que una simple vida microscópica se generara sobre el planeta, tampoco saben cuántas estrellas hicieron supernovas y cuantas especies se extinguieron para que nosotros podamos estar aquí hoy haciendo precisamente eso, perder nuestro tiempo caminando hacia ninguna parte.

7:00 p.m.

El sol se ocultó, salió a reemplazarlo la luna y las estrellas como gritando “¡Aquí estamos, observen lo grande y majestuoso que es el universo, no es necesario que se maten y peleen por espacios allá abajo, tampoco por razas o credos porque son tan minúsculos e insignificantes ante lo que los rodea que a simple vista son todos exactamente iguales!” Nadie escucha, todos parecen muy ocupados caminando hacia ninguna parte.

11:00 p.m.

Faltando poco para finalizar el día, me acuesto en mi cama y me pregunto a mí mismo ¿Otro día más u otro día menos? Depende hacia donde este mirando, hacia el pasado o hacia el futuro. Mi duda radica en que si no miro hacia el pasado de nada habrá valido la pena todo lo que me ha sucedido y nada habré aprendido de mis experiencias y si no miro hacia el futuro nunca voy a tener claro que es lo que quiero y hacia dónde voy, pensando en ello me duermo nuevamente a la espera que suene el despertador en otro día a las 6:00 a.m.